El pacto de gobierno que firmaron el pasado viernes PP y Cipal en Altea para lograr un gobierno "estable y fuerte" ya ha generado críticas. Ayer, el Bloc de Altea emitió un comunicado en el que afirma que el pacto "ya existía desde el mismo día de las elecciones" y que si no se ha hecho público antes es porque a "Carolina Punset (Cipal) le daba vergüenza que la gente se diera cuenta tan pronto de sus intenciones de gobernar con quien fuera".

Desde la formación nacionalista aseguran que e alcalde, el popular Miguel Ortiz, " ha elegido el camino fácil". "No ha intentado, ni tan solo en una ocasión, buscar el apoyo del Bloc para sacar adelante alguna de sus primeras propuestas. Ha elegido la comodidad que le da un pacto cerrado por encima de buscar, en cada momento, acuerdos en favor de Altea". El Bloc agregó que el pacto PP-Cipal "únicamente responde a las necesidades" de los líderes de los dos partidos: "Miguel Ortiz, un alcalde en pleno ocaso político que teme injustificadamente una moción de censura y se aferra al poder porque necesita una salida digna que no pasa por ser oposición". "Y Carolina Punset que necesita protagonismo (prensa, fotos, radio, etc.) para consolidar su cuota de poder, pues si ahora eso no se lo podía dar el PSOE, se lo daría el PP, además de un salario mejor para ella y para sus dos concejales".

El BNV recuerda que al principio de la legislatura ya manifestó que haría "una oposición constructiva y positiva, que ayudara al gobierno en minoría del PP a afrontar los tiempos de crisis, un gobierno abierto, donde todos participemos con propuestas para mejorar la penosa situación en que se encuentra Altea tras años de gobiernos que han vivido fuera de la realidad y que no se han preocupado en absoluto por el futuro del pueblo". "El habría podido gobernar con total tranquilidad en minoría porque, entre otras cosas, el Bloc ya les hizo saber que no intentaría formar otras mayorías inviables".

A la líder de Cipal, los nacionalistas le recriminan sus declaraciones cuando firmó el pacto de gobierno con Ortiz, en donde dijo que serán mucho más útiles para Altea haciendo realidad este plan de trabajo, que criticando desde la oposición al equipo de gobierno. Punset, "ha decidido no quedarse cacareando en la oposición, tal y como ella mismo dijo".

Esta fuerza política es muy crítica con la coalición PP-Cipal y asevera que "la cosa queda en una suma de intereses: la tranquilidad de un alcalde que dejó Altea en la ruina tras años de estabilidad económica y el protagonismo de una persona que le da igual Altea, Finestrat o Ibiza. Los primeros resultados de esta alianza para el Bloc son "el intento de quitar el Grado Elemental del Conservatorio y la negativa a que la subida de tasas se haga de manera progresiva". El comunicado también incide en que la Feria EcoAltea "organizada por la asociación de donde han salido la mitad de los cargos de Cipal, nos cuesta en época de crisis 15.000 euros" e insiste al gobierno "compartir sus planes, sobre todo respecto al presupuesto municipal".