Hay cuestiones que deben agradecerse siempre. El alcalde de Benidorm, el socialista Agustín Navarro, firmó ayer un decreto por el que nombra a José Bañuls, el exconcejal tránsfuga del PP que en septiembre de 2009 le dio la Alcaldía tras romper con los populares, nuevo cargo de confianza en el área de Juventud. No se trata sólo de pagar un favor histórico. Con esta designación, Navarro vuelve a maniobrar para mantener el equilibrio de su actual gobierno en minoría, donde la concejala de Juventud (además de Tráfico y Movilidad), María del Carmen Martínez, es una mujer de Bañuls: fue de hecho su secretaria en la anterior legislatura, cuando el exedil llevaba precisamente esas dos últimas competencias. Ahora los papeles se intercambian: Martínez es la concejala y Bañuls, que ya no es edil, la asesorará.

En realidad, la incorporación de Martínez en la lista electoral socialista salvó una crisis, desatada en febrero de este año, cuando Bañuls amenazó con romper el gobierno de Navarro si no se le incluía en la lista electoral del PSOE. No lo logró. Su condición de tránsfuga pesaba demasiado. Pero a cambió consiguió que los socialistas incorporaran en su candidatura a la que entonces era su secretaria. Y -también a cambio- Navarro le hizo durante aquel invierno una promesa: anunció que si ganaba las elecciones, como así ha sido, Bañuls seguiría en el Ayuntamiento, si no podía ser como concejal, incorporado al organigrama técnico municipal, al considerarlo un hombre "indispensable". Esa es la promesa que ahora ha cumplido el munícipe, consciente de que su gabinete ya tiene demasiados problemas al encontrarse en minoría como para encima abrir otro frente más de conflictos.

Y, pese a todo, eso ha sido lo que ha estado a punto de suceder. Porque la incorporación ahora del exregidor tránsfuga al Consistorio tampoco ha sido fácil: oficialmente es sólo asesor de Juventud, una de las carteras que lleva Martínez y no precisamente de las más importantes. Además, es una de las áreas en la que Bañuls no trabajó durante la pasada legislatura. En realidad, el exedil aspiraba a asesorar a su antigua secretaria en Tráfico y Movilidad, departamentos que le son mucho más familiares. El problema es que ese cargo no pudo ser aprobado por el pleno simplemente porque no existe: no consta en la relación del personal eventual elevada por el propio Navarro. Ayer se respiró por ese motivo cierta tensión en los despachos consistoriales. Al final, y a pesar de lo que dice el decreto que reproduce este diario, se ha alcanzado una situación de compromiso, tal y como la explicó ayer el propio Bañuls aunque sin aludir a ningún tipo de crispación: "Seré el asesor de María del Carmen Martínez y como tal la apoyaré en todas sus áreas incluidas aquellas cuya gestión en la pasada legislatura fue todo un éxito".

Por cierto, que Bañuls agregó que "asesoraré también a la edil en cuestiones políticas". Un aviso para navegantes: el exedil seguirá proyectando su sombra y su peso en el actual ejecutivo de Navarro. Ya lo advirtió antes de las elecciones, cuando dijo que la presencia de la regidora en la lista del PSOE era la cuota que aportaba su antiguo partido (Iniciativa Independiente, que Bañuls lideró antes de su paso al PP en 2007) para apoyar a los socialistas y no presentarse a la liza electoral.

Como asesor, Bañuls cobrará 1.744 ? al mes. En relación al resto de cargos de confianza hay sueldos mucho más altos: es el caso del coordinador del gabinete de Alcaldía (2.676 ?) o de la asesora en el área de Economía (2.379?). Por debajo del sueldo de Bañuls sólo están los secretarios de grupo y los funcionarios de apoyo. En esta relación del personal eventual está también en Urbanismo el histórico socialista Ángel de la Fuente. No es la única presencia de cargos vinculados al PSOE: Santiago Vañó, exsecretario de juventud del PSPV, abandona Valencia para desembarcar en Benidorm; el secretario de grupo será David Torres, hijo del exedil socialista Edmundo Torres; y el secretario de Organización, Bernardo Mira, asesorará en Empleo.