La Plaça de la Unió Europea de Finestrat se convirtió ayer en una pista de carreras rodeada de espectadores que no quisieron perderse el espectáculo que prometía la I Feria de Modelismo y Dioramas. Allí se vieron más de un centenar de modelos de Radio Control, que pudieron adquirirse mediante intercambio o compra-venta en alguno de los 15 puestos montados al efecto por los organizadores, según indicó su representante Lino López. Se trataba de una iniciativa promovida por un grupo de amigos residentes en Finestrat y amantes del modelismo, que mostraron además los dioramas realizados con sus artefactos, recreando modelos históricos de la II Guerra Mundial y otros de ficción pertenecientes al universo de la Guerra de las Galaxias.
Entre las curiosidades de la jornada pudo verse un robot artificiero y disfrutar de un programa paralelo de actividades que incluyó poesía urbana, recital musial con guitarra española y grafitis inspirados en el entorno finestrense.
