Las obras de restauración de la capilla de Santa Marta de la iglesia de la Asunción de La Vila Joiosa han permitido descubrir un sillar romano que podría haber pertenecido a la mítica ciudad de Allon, según informaron ayer desde el Ayuntamiento vilero.

Se trata de un sillar de piedra de época romana de enormes proporciones, según concretaron fuentes municipales, de 1,55 metros de largo por 93 centímetros de ancho y 40 centímetros de profundidad, que soportaba el altar de la capilla.

Tras el análisis y la documentación gráfica del hallazgo, los servicios arqueológicos municipales estudian la posibilidad de mantener el gran sillar a la vista dentro de la propia capilla para ponerlo en valor, según señalaron desde el Consistorio.

La Concejalía de Cultura del Ayuntamiento de La Vila Joiosa explicó que durante el desarrollo de los trabajos de restauración de la iglesia de la Asunción se descubrió, tras retirar el altar de madera de la Capilla de Santa Marta, este sillar de piedra de época romana de enormes proporciones.

La concejala de Cultura, Loli Such, explicó que "el sillar se encuentra incrustado apenas unos centímetros en el suelo original de la capilla, construida en 1740, lo que demuestra que fue entonces cuando se trasladó a este lugar para sustentar el altar". "Posteriormente", prosiguió la edil, "tras la reforma de la capilla en los años 50, la parte inferior del sillar quedó cubierta por el nuevo pavimento del presbiterio".

El Director del Museo Municipal, Antonio Espinosa, señaló: "pensamos que durante el momento de construcción de la capilla, a mediados del siglo XVIII, se produce la extracción del foro romano de este gran sillar, junto con otros de dimensiones más reducidas que hoy se pueden apreciar en los muros exteriores de la capilla, para reutilizarlos en la construcción". Espinosa recordó que "años atrás ya se halló una enorme dovela de piedra en los cimientos del cercano Café Mercantil" y opinó que "ambas piezas podrían haber pertenecido a algún gran monumento, quizá alguna puerta monumental de entrada a la ciudad romana de Allon".

Loli Such ha destacó que "se está estudiando la posibilidad de mantener el gran sillar a la vista dentro de la propia capilla, en su ubicación actual, ya que se trata de un elemento que nos muestra parte de la historia no solo de la época romana, sino de la propia Iglesia de Nuestra Señora de la Asunción, cuyos muros contienen numerosos sillares e inscripciones de la ciudad romana, muchos de los cuales todavía permanecen ocultos".

Antonio Espinosa añadió que "las grandes dimensiones del sillar y el hecho de que sólo tenga una cara lisa, permite aventurar que se trata de parte de la cimentación de uno de los monumentos del foro de la ciudad romana" de La Vila, que "se encontraba a escasa distancia de donde hoy se encuentra la Iglesia".

El gran sillar rectangular, de aproximadamente 1,5 toneladas de peso, presenta una factura claramente romana con una orificio rectangular en una de sus caras, típico de esta época, que se utilizaba para ensamblar varios sillares mediante un vástago de hierro y como enganche para poder trasladar este tipo de piedras de grandes dimensiones mediante grúas.