Contar sólo con los de casa. Ésta está siendo la realidad con la que trabajan los equipos electorales de los dos grandes partidos (PSOE y PP) en Benidorm, una circunstancia que no necesariamente es interpretada en clave negativa por todos los interesados. Mientras que en lo que llevamos de campaña Francisco Camps ha venido a echar una mano a su compañera Mercedes Alonso y, tal vez por aquello de compensar fuerzas, el presidente del Congreso, José Bono, ha hecho lo propio con el alcalde y candidato socialista en esa ciudad, Alejandro Soler, no está previsto que por Benidorm desfilen grandes figuras de la política nacional o regional, a excepción de la ministra de Sanidad, Leire Pajín, que el sábado asistió con más pena que gloria a un acto del PSOE organizado por la comarca.

Salvo imprevistos, no se espera que los socialistas vayan a recibir más visitas de sus compañeros de Madrid, y eso que tanto Alfredo Pérez Rubalcaba como Ramón Jaúregui estarán cerca cuando se desplacen la semana que viene a Elche y a Alicante respectivamente. No es ninguna sorpresa dadas las especiales circunstancias en que el PSOE concurre a las urnas en Benidorm, con una lista encabezada y de la que forman parte más de media docena de independientes, los mismos (más una, la impuesta por el tránsfuga Bañuls) que fueron expulsados del partido tras la moción de censura que llevó a Agustín Navarro a la Alcaldía.

En cuando a Valencia, mejor que así sea. La desgana con que se están repartiendo los sobres color sepia con las papeletas para las Cortes da una idea de por dónde se mueve el feeling de los socialistas de Benidorm con la cúpula del partido en la Comunidad.

Tampoco es que los populares vayan más sobrados de apoyos externos. Tras el pinchazo de Esteban González Pons en un acto convocado para apoyar al candidato popular tras conocerse la escisión de Gema Amor, fueron Gerardo Camps y Antonio Clemente (y no el jefe del Consell) quienes arroparon a Manuel Pérez Fenoll en la presentación de su candidatura. Ayer mismo, el PP confirmó la presencia el lunes en Alicante de Jaime Mayor Oreja para asistir a una comida-mitin, un eurodiputado que, aún a sabiendas de sus debilidades y con el debate sobre Bildu y Eta caliente, no deja de ser caza menor.

Nada se sabía ayer, por contra, de las intenciones del presidente de los populares en la Comunidad, quien ha confirmado una gira el domingo por las Marinas, en la que tiene previsto hacer parada en La Vila, Alfaz, Denia y Xàbia, pero cuya presencia en Benidorm está en el aire. Cabe la posibilidad de que pudiera estar en un mitin el jueves en la capital de la Costa Blanca, pero de momento no está confirmado.