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Un total de 408 personas adquirió la noche del sábado, al precio de 10 euros, su entrada para asistir a la presentación del programa electoral de Alternativa por Benidorm, el partido de nueva creación formado mayoritariamente por empresarios del municipio.

Ni sorteaban coches ni televisores de plasma. Simplemente invitaban a un cóctel -generoso eso sí-, durante el acto que organizaron para explicar sus principales propuestas electorales. Y llenaron. De hecho, consiguieron casi el mismo número de personas que acudió unas horas antes al acto convocado por la Secretaría Comarcal del PSPV-PSOE para arropar a la ministra Leyre Pajín, en su pueblo, y con el aliciente de dar en el mismo paella gratis para todos.

Los de "Alternativa" hicieron gala de su nombre y apostaron por proseguir con su campaña a su manera, alejada al del resto de partidos, cobrando por primera vez en la historia de la ciudad la entrada a quienes dirigían su acto electoral: sus posibles votantes, y representantes de colectivos de la ciudad (hasta pagaron su entrada, según confirmaron, el presidente de Aptur y un vicepresidente de Hosbec).

Después, el acto (organizado en el hotel Meliá de Benidorm), arrancó con el cabeza de lista, el empresario Juan Balastegui, quien empezó su intervención con un "si alguno de los presentes espera escuchar un discurso típico de políticos profesionales, es mejor que se vaya, porque yo ni lo soy, ni quiero serlo".

Y de ahí saltó a su "Top-12", propuestas que dijo son "realistas" y "realizables" y entre las que figuraban, entre otras, la congelación de impuestos municipales como el IBI, el recorte en gastos de personal y supresión de subvenciones anuales, a excepción de las destinadas a política social, limitando el resto a colaboraciones puntuales, incremento de actividades en las playas que proporcionen más financiación al Ayuntamiento y más diversión a los usuarios.

Otras propuestas consisten en un "carnet benidormense" para que quien esté empadronado tenga descuentos en todos los servicios públicos del municipio y, como impulso al turismo, "52 semanas, 52 eventos", además de convertir a Benidorm en un centro de tecnificación deportivo para atletas del norte de Europa durante todo el invierno.