Poco han durado los puestos de animación callejera instalados en el Parque de L'Aigüera. La ambiciosa iniciativa del gobierno de Benidorm para este verano en el recinto ya ha resultado fallida en este aspecto. Y es que el alcalde de la ciudad, Agustín Navarro, se ha visto obligado a ordenar la retirada de los puestos instalados entre los auditorios Oscar Esplá y Julio Iglesias. La explicación oficial es que "no daban la imagen que queremos y buscamos".

Navarro anunció ayer que ha dado la orden para que sean retirados los puestos "porque pueden estar bien para una feria de fin de semana, pero no para los tres meses de verano". El primer edil admitió que "no me gusta la imagen que se ha dado", aunque precisó que el resto de la oferta se mantendrá como está al tiempo que se agilizarán otras actividades que en principio estaban pospuestas para después de septiembre. "No podemos estar luchando en favor de la escena urbana y empezar de esta manera" volvió a recalcar Navarro, que no quiso profundizar más en las causas de su decisión. Otras fuentes del equipo de gobierno reconocieron que las "jaimas" instaladas distaban mucho de ser lo que buscaban. "Había ropa tendida fuera, hamacas entre los árboles, gente durmiendo dentro y a algunos se les veía consumiendo drogas al lado de niños pequeños".

A juicio de Navarro, los puestos en cuestión "no cumplen con la idea que estaba planteada, por eso se ha dado orden de que se desmonten". Añadió que "vamos a intentar suplir esta oferta con otras actividades, para lo cual, los distintos concejales ya están trabajando para encontrar algo acorde con el programa". "Lo que queríamos -añadió- era que el parque tuviera desfiles y animación y para ello también había que instalar estos puestos". El alcalde también dijo que no habían recibido quejas hasta el momento, pero que habían preferido actuar antes de que se produjeran.