Varios encapuchados asaltaron en la madrugada de ayer lunes una vivienda de Altea ocupada por dos ancianas que resultaron golpeadas, aunque sus heridas, afortunadamente no revistieron gravedad. Los asaltantes, cuya identidad se desconoce, se dieron a la fuga y hasta el momento no han sido localizados.

Los hechos ocurrieron antes de las 4.50 de la mañana, hora en la que la Policía Local recibió el aviso procedente de la vivienda. Las dos mujeres septuagenarias son hermanas y residen juntas en una vivienda ubicada en la partida rural Cap Negret de Altea. Según relataron fuentes de la Policía Local los ladrones accedieron a la casa, que da a la carretera N-332, por la puerta principal, aunque no pudieron precisar la forma en la que entraron al domicilio. Una vez en el interior cogieron a las ancianas, las amordazaron y las ataron por las muñecas. A una de ellas la golpearon en la cara en una ocasión, aunque la otra hermana salió peor parada al recibir varios golpes más. Según su testimonio a los agentes intervinientes, los asaltantes eran cuatro en total y las golpearon para que les dijeran dónde guardaban el dinero y las joyas.

Las dos mujeres, que se encontraban visiblemente alteradas y nerviosas, contaron que aparentemente les habían robado sólo joyas de no mucho valor económico pero sí sentimental, según explicaron desde la Policía Local. Los ladrones se dieron a a fuga nada más cometer el robo y fue después cuando ambas hermanas llamaron a la Policía.

Hasta el lugar se traslado también una ambulancia de la ONG DYA de Altea, que procedió a realizar las primeras curas a las heridas, no siendo necesario su ingreso en el hospital. Las mujeres declararon a la Guardia Civil, que también intervino, que no podían precisar si se trataba de españoles o extranjeros. La policía judicial permaneció en el lugar para tratar de encontrar más pistas.