Los concejales del PSPV-PSOE de La Vila, Gaspar Lloret y Marco Antonio Vidal, presentaron el jueves, en el Juzgado número 1 del municipio, una querella criminal contra el alcalde de la localidad, Jaime Lloret, y ocho ediles del Partido Popular, en la que se les acusa de un delito de "denuncia falsa". Esta causa responde a la denuncia que Jaime Lloret y sus compañeros de partido formularon estando en la oposición contra el entonces alcalde, Gaspar Lloret, y contra Marco Antonio Vidal, concejal de Seguridad Ciudadana, hasta la moción de censura que propició el cambio de gobierno vilero, acusándoles de prevaricación y malversación de caudales públicos en la compra de dos motocicletas para la Policía Local. Una actuación que realizaron, según recordó ayer Marco Antonio Vidal, "pese a que sabían que era falsa, como ha quedado demostrado en la Audiencia Provincial, y como así me lo confesaron varios a título personal, pero que igualmente usaron para desprestigiarnos". Por ello, según añadió, han optado por presentarles la querella. "Sencillamente, no puede salir gratis acusar a alguien de un delito que no ha cometido, y más públicamente, sin ningún reparo, tienen que responder ante la justicia y ante la opinión pública".

En la denuncia, los socialistas pide que se exija a los imputados una fianza para cubrir las responsabilidades civiles que puedan declararse procedentes, que cifran en 30.000 euros, y que en caso de no presentarse la fianza, se decrete el embargo de sus bienes. Aun así, Vidal aseguró que "el dinero es lo de menos".

Los concejales contra los que se ha presentado la querella criminal son: Loli Such (portavoz del gobierno local); Marcos Zaragoza (edil de Deportes); Jerónimo Lloret (edil de Urbanismo); José María Béjar (edil de Servicios Técnicos); María Isabel Lloret (edil de Bienestar Social); Pascual Pastor (edil de Personal); Charo Escrig (edil de Fiestas); y Mª Milagros Cantó (edil de Educación). La única edil popular que no está acusada es la actual responsable de Seguridad Ciudadana, "porque no llegó a adherir su firma a la denuncia de sus compañeros".

En la denuncia se exponen muchos detalles del caso de la compra de vehículos policiales que reflejan, según Vidal, la falsedad de todo cuanto contaron los citados dirigentes populares, "como afirmar que hinché los precios para que la moto que me pagué con mi dinero me saliera gratis".

El alcalde, Jaime Lloret, al igual que el resto de los regidores implicados, rehusó ayer hacer cualquier tipo de declaración, a la espera de conocer más detalles sobre el procedimiento judicial abierto contra ellos.

Por otra parte, sigue pendiente de dictarse fecha para la celebración del juicio de Marco Antonio Vidal contra Pedro Ramis, propietario del establecimiento que vendió las motocicletas, y proveedor del Ayuntamiento durante años, acusado de calumnias e injurias.