El alcalde de Crevillent, José Manuel Penalva, anuncia que adaptarán el presupuesto municipal para implementar planes de ayuda con los que hacer más llevaderas las consecuencias económicas que se prevén de la crisis sanitaria por el coronavirus. El primer edil apunta que están trabajando, dentro de las competencias municipales, para que hayan facilidades en el pago de impuestos para la ciudadanía. También pretenden gestionar ayudas para todos aquellos autónomos y PYMES que han tenido que cesar la actividad tras decretarse el estado de alarma.

La primera medida que propone el alcalde es la ampliación de los plazos de pago de las tasas e impuestos municipales de forma general, así como un fracionamiento de dichos impuestos. El siguiente paso sería aplicar exención, bonificación o reducción de ciertas tasas y precios públicos vinculadas a un servicio o derecho que no ha podido prestarse como consecuencia de las medidas de restricción impuestas por el estado de alarma, como son la ocupación de vía pública, en el caso de las terrazas, la tasa de recogida de basura o las tasas por el uso de instalaciones deportivas, culturales, o escuelas municipales, entre otras.

Penalva avanza que piensan incorporar un programa de subvenciones y ayudas a los colectivos más vulnerables o que como consecuencia de las medidas restrictivas hayan aminorado sustancialmente su nivel de ingresos, todo para reducir la carga fiscal.

El alcalde apunta, además, que pedirá al presidente de la Diputación Provincial, Carlos Mazón, como máximo responsable de SUMA Gestión Tributaria, que amplíe los plazos de cobro de los impuestos y tasas municipales, ya que "la medida inicialmente adoptada de ampliar el pago a junio es manifiestamente insuficiente debido a la prolongación del estado de alarma", según Penalva. También pedirán a Hidraqua, concesionaria del agua potable, y a Cooperativa Eléctrica que "hagan un esfuerzo adicional en estos momentos de crisis" para flexibilizar y personalizar el pago del agua y la luz, así como reducir las tarifas y las facturas, "teniendo en cuenta que el confinamiento genera más gasto a las familias en estos servicios básicos", explica el primer edil.

Los planes del ejecutivo local están en fase de estudio y por lo tanto desde el equipo de gobierno van a encomendar a los Servicios Económicos del Consistorio las medidas que tienen que adoptarse para que se lleven a cabo, ya que deberán esperar a la liquidación de las cuentas de 2019 para que quede clara la capacidad que tiene el Consistorio para asumir estas medidas. El edil de Buen Gobierno, Gregorio Díaz-Marta, será quién las explique a la población tras exponérselas al resto de la corporación.

A pesar de las buenas intenciones, desde el primer edil, José Manuel Penalva, señala que los Ayuntamientos tienen limitaciones jurídicas que los ayuntamientos tienen en cuanto a las posibilidades de exenciones y bonificaciones, ya que sólo pueden realizarse aquellas que están establecidas en la Ley de Haciendas Locales, así como de las limitaciones que establece la Ley General de Subvenciones. No obstante, asegura el alcalde que harán todo lo posible para "aminorar las dificultades por las que está pasando la ciudadanía en general".

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