La naves del astillero de Santa Pola podrían tener una segunda vida enfocada al mundo del submarinismo. El equipo de gobierno de la villa marinera continúa remitiendo documentación a la dirección General de Costas para que el Ayuntamiento consiga la concesión del astillero por 50 años, unos planes que aprobó por unanimidad la corporación municipal. Paralelamente a la vía burocrática, desde el ejecutivo local confirman a INFORMACIÓN que en los últimos días han mantenido un primer contacto con una gran empresa de buceo comprometida con los valores de la economía azul que les ha presentado un proyecto porque está interesada en explotar una parte de las naves, sin olvidar que el grueso del proyecto que el Ayuntamiento plantea iría encaminado al aspecto docente, como campus de deportes marítimos donde sería importante el papel de instituciones públicas como la Universidad Miguel Hernández (UMH) de Elche, así como otros entes como el Centro de Investigaciones Marinas, dependiente de la Universidad de Alicante (UA).
Desde el ejecutivo local reseñan que todavía es prematura esta alternativa, ya que están explorando de qué manera podría beneficiar a la villa marinera que el proyecto para Vatasa también fomente el submarinismo, una actividad que apenas está explorada.
En caso de que se consolide esta opción, el Consistorio tendrá que remitir a Costas un estudio económico sobre esta nueva actividad, como ha tenido que hacerlo recientemente para demostrar que es viable que puedan instalarse establecimientos dedicados al ocio, como es el caso de la restauración. Con ello, los técnicos tendrán que seguir enviando todos los avances del proyecto. Desde la Dirección General de la Costa y el Mar también precisan al Ayuntamiento que aclare si pretende utilizar las dos naves. En este sentido, desde el equipo de gobierno explican que plantean que quede descartado el anexo a la instalación más grande, que es de tamaño reducido, ya que tendría poca funcionalidad.
Presión
En otro orden de cosas, la Plataforma Salvem Vatasa ha enviado recientemente a la Subdelegación del Gobierno cerca de 3.500 firmas que han reunido en los últimos meses por parte de la ciudadanía y visitantes de Santa Pola para presionar a la Administración para que ceda a la recuperación de la zona para fines deportivos, culturales y sociales. Según el colectivo, desde la Dirección Provincial se han mostrado receptivos a facilitar el desarrollo de la zona aunque señalan desde la plataforma que Costas presiente que será inevitable la demolición de las naves porque contiene productos tóxicos como fibrocemento. Aún y así, la licitación de las obras para demoler ambas instalaciones sigue paralizada porque el Ayuntamiento sigue hasta la fecha remitiéndole documentación para logar la concesión.
En este sentido, desde Salvem Vatasa entienden que es más viable descontaminar las naves que el derribo, ya que consideran que esta segunda opción sería más costosa y lastraría el desarrollo estratégico de la zona. Desde la plataforma señalan que Costas les han transmitido que hay menos riesgo de que desaparezca el espigón, aunque sigue en marcha un estudio de dinámica litoral para conocer el impacto ambiental que tendría para Santa Pola unir las playas de Varadero y Santiago Bernabéu si se acaba con esta infraestructura centenaria. Salvem Vatasa apunta que seguirán movilizándose para conseguir más apoyos. Para que el mensaje llegue más lejos, se han puesto en contacto con la exalcaldesa y diputada nacional socialista, Yolanda Seva, para que visibilice a escala nacional las necesidades que tiene una parte de la villa marinera para aprovechar el astillero.
