La relación de puestos de trabajo (RPT) de los funcionarios de Crevillent ha vuelto a la primera línea del debate, ya que esta semana se han retomado las mesas de negociación para intentar cuadrar un organigrama que beneficie a los trabajadores municipales, desde que la Subdelegación del Gobierno tumbase en marzo la RPT que durante casi cuatro años estuvo negociando el gobierno del PP con los sindicatos, ya que el complemento específico quedaba por encima del margen legal. Durante este mandato ya hubo un primer encuentro hace meses pero sólo para constituir la mesa de negociación. En esta segunda sesión, celebrada esta semana, el tripartito explicó a los sindicatos y grupos de la oposición que pretenden revisar la RPT anulada, y para ello tienen previsto encargar un estudio a un catedrático de Economía y Recursos Humanos de la Universidad de Alicante (UA).

La misión será realizar un nuevo organigrama y actualizar la estructura salarial de los funcionarios, todo para equilibrar los sueldos de los trabajadores y acercarlos a la media, así como compensar los complementos como el específico, que quedaba excedido según los parámetros legales y por ello no pudo aplicarse la nueva RPT en Crevillent.

Por otro lado, el equipo de gobierno acordó que se llevará a pleno una modificación de esta relación de puestos para incorporar unos diez nuevos puestos como refuerzo en algunos departamentos. Plantean que el Ayuntamiento cuente con un segundo arquitecto, así como con un técnico de Recursos Humanos que no tiene el Consistorio, técnico de Medio Ambiente y un administrativo, todo para aumentar la agilidad y «dar un poco de sentido organizativo y más eficacia y estabilidad», señala el edil de Personal, Jesús Ruiz.

También se incluirían otros puestos que en 2018 estaban contemplados en el anterior mandato pero no se impulsaron como la figura de un psicólogo, educadores sociales, trabajador social, técnico en Turismo y Fiestas, técnico especialista en Informática y policía de segunda actividad, que entrarían en esa nueva relación si el pleno lo aprueba.

Reacciones

Después de oir las propuestas del tripartito, el exalcalde popular, César Asencio, defiende que la relación de puestos que en su día negociaron «está bien» y sigue insistiendo en que fueron los sindicatos quiénes pidieron más complemento específico a pesar de que advirtió de que podía sobrepasarse la ley. Desde el PP expresan que podría modificarse la valoración excedida y temen que empiece de cero el proceso alargando la negociación por más años. Sin embargo, desde el ejecutivo indican que están trabajando para que a principios de 2020 haya un reglamento de productividad, y en cuanto a plazos, señalan que han negociado con la universidad para que el organigrama esté completado en medio año y la estructura salarial en 8 meses. Los populares, por otro lado, critican que ahora el gobierno externalice la RPT a la UA porque en su momento fueron criticados por pedir asesoramiento a un técnico de la Diputación Provincial para elaborar el documento, y dudan de que el resultado sea más completo. Algunos grupos de la oposición como Cs apuntan que la negociación se está alargando «más de lo justificable» y que debe hacerse lo antes posible, sin poner objeciones a que se contraten los servicios del catedrático.

Desde UGT, uno de los sindicatos representados, esperan que se beneficien todas las partes, piden que se establezca una productividad para mejorar la atención y eficacia al ciudadano y que «como mínimo se respete la partida de la negociación de 440.000 euros del PP en los próximos presupuestos, porque si se rebaja, por nuestra parte tendrán un frente», señala Juan Cutillas, delegado de la Junta de Personal de la sección sindical.