Correr la maratón de Atenas, subir las montañas nevadas de Noruega o practicar barranquismo en Eslovenia para reunir fondos contra el alzhéimer. Estos son algunos de los retos a los que se están enfrentando un grupo de policías locales de la asociación de Intercambio policial internacional Star Spain, que hace un mes iniciaron una travesía por 35 países desde Santa Pola acompañados del elefante «Félix», un peluche integrado en el cuerpo al que le han diagnosticado recientemente la enfermedad y se dedica a buscar los recuerdos perdidos de todas aquellas personas que sufren como él. Por el momento han recorrido 24 países por relevos de dos a cuatro agentes y desde el colectivo ya están preparando una llegada triunfal en Santa Pola, que está prevista dentro de unas tres semanas. Aún y así, todavía desconocen qué día concreto concluirá esta intensa campaña solidaria porque todo dependerá de las condiciones climatológicas de cada país, y de los medios técnicos para volver. Por otro lado, según Jordan Dorado, presidente de Star Spain, tienen previsto celebrar el próximo 19 de octubre una fiesta remember en la discoteca Camelot de Santa Pola desde las 17 horas hasta la madrugada con el objetivo de hacer un llamamiento a los vecinos para reunir fondos que se destinarán a las asociaciones de Alzheimer de Santa Pola y Elche (AFA y AFAE) y contribuir en la investigación de la Fundación Cien (Centro de Investigación de Enfermedades Neurológicas)para encontrar terapias que frenen el avance de la enfermedad.

Impacto

Según Dorado, que inició el primer tramo junto a otros compañeros, por ahora desconocen cuál es el impacto que tendrá la campaña del «Gran viaje de Félix» a nivel económico, aunque siguen intentando despertar conciencias entre particulares e instituciones «tocando el corazón de una forma divertida con el peluche» para seguir aumentando la financiación de diferentes estudios científicos «porque todos llevamos un Félix dentro y no sabemos donde nos va a tocar y es un símbolo para luchar contra el enemigo invisible», reseña Dorado, que ideó este nombre para la campaña en honor a su padre, que padeció la enfermedad.

En cuanto al trato que están recibiendo por el continente, desde la asociación destacan que los compañeros del gremio del resto de países se están volcando y se muestran participativos, sin que apenas existan trabas en el idioma porque ven claro el mensaje. Es más, estos cuerpos de policía está poniéndole retos a Félix y a sus acompañantes durante esta larga travesía que se está recorriendo a toda velocidad en una furgoneta en la que pasan gran parte del día para recorrer enclaves únicos como la casa en el suroeste de Polonia donde falleció Alois Alzheimer, psiquiatra y neurólogo alemán que identificó por primera vez los síntomas de la enfermedad. Por ahora han recorrido más de 15.000 kilómetros en busca del ladrón de recuerdos e incluso han llegado hasta Laponia (Finlandia) para pedirle a Papá Noel que se ataje esta enfermedad que afecta a tantas personas.