El busto en honor al canónigo Cayetano Miguel Manchón de Crevillent ha desaparecido después de que el monolito se inaugurase hace tan sólo dos meses. La Policía Local está investigando este robo para dar con los responsables del acto vandálico. Desde el Ayuntamiento condenan este nuevo caso de vandalismo porque «ponen en peligro el patrimonio tanto municipal como de carácter privado». Así las cosas, desde el Consistorio indican que está abierta la investigación después de que se haya realizado un informe sobre el robo, y que en cuanto se de con los autores estarán expuestos a las sanciones que exija la ley.
Además, desde la Administración local hacen un llamamiento a la ciudadanía para que respeten el patrimonio, ya que no es la primera vez que ocurren este tipo de robos. Uno de los últimos casos fue el de diciembre de 2018 cuando desaparecieron una de las tres placas de bronce del monumento del Paseo Fontenay en honor a las fiestas de Moros y Cristianos. Este monumento fue posible gracias a las donaciones de particulares, festeros y entidades como la Cooperativa Eléctrica o el Ayuntamiento, y una vez levantado fue cedido al municipio. Por ello es uno de los más reconocidos en el municipio alfombrero por ser un canto a la paz, a la armonía y a la convivencia entre las culturas musulmana y cristiana, según contaban desde el ente festero momentos después de descubrir el robo de esta valiosa pieza. Este símbolo festero se diseñó en 1998 por el escultor Miguel Ruiz, el mismo artista que ahora ha vuelto a verse afectado por este hurto, ya que también es el autor del monolito en honor al Canónigo Manchón, que donó a todos los crevillentinos este homenaje en forma de monumento que por ahora sigue en paradero desconocido y que en su momento modeló el artista durante un taller municipal de escultura hace ya varios años. Este monolito se instaló el 12 de junio con el anterior equipo de gobierno del PP frente a la puerta de acceso al Auditorio Municipal.
