El distrito marítimo de Santa Pola echa la persiana hasta mediados de agosto y todos los marineros que no recurran a la administración electrónica tendrán que resolver los trámites de sus embarcaciones en cuanto a enroles, firma de despachos o cambios de titularidad, entre otros, acudiendo directamente a la Capitanía Marítima de Alicante. Se ha tenido que llegar al punto del cierre de las dependencias porque no hay relevo de personal ya que en diciembre se jubiló el jefe de distrito y sólo hay un administrativo que trabaja en las oficinas locales de la Marina Mercante, y desde ayer está de vacaciones hasta el próximo mes.

Con el cierre los marineros y propietarios de embarcaciones de recreo tendrán que desplazarse veinte kilómetros hasta la Capitanía Marítima para que les sellen la documentación que requieren, lo que supone que muchos pescadores pierdan un tiempo que utilizan para faenar para trasladarse de municipio. Desde la asociación de armadores de Santa Pola explican que esta situación dificultará el trabajo de los marineros, porque continuamente están en contacto con el distrito y más precisamente en estas fechas, recién terminado el paro biológico, porque muchas embarcaciones tienen que volver a pasar inspecciones y más pruebas que de media suelen realizar cada dos meses. Fuentes cercanas al distrito reseñan que casi todos los expedientes se llevan al día a pesar de las limitaciones de personal, pero con el parón de las vacaciones habrá certificados de navegabilidad o registro de buques que pasarán a la Capitanía.

Según Reme Ruso, presidenta del colectivo de armadores, sólo una minoría próxima al 20% de socios tiene la costumbre de realizar trámites por vía telemática en Santa Pola, por lo que consideran que es una merma de derechos perder temporalmente esta sede local, teniendo en cuenta que el puerto de la villa marinera es uno de los que más calado tiene en la Comunidad Valenciana con 35 barcos de arrastre y 70 de artes menores registrados, además de casi un millar de embarcaciones de recreo.

Actualización

Aún y así los armadores reconocen que tienen que actualizarse a los nuevos tiempos para que no les pase factura esta situación, en la que la villa marinera se queda desprovista de un servicio cercano a los marineros. Desde el Club Náutico señalan que la mayoría de documentación como la relativa a cambios de titularidad la están realizando por vía telemática por lo que no se sienten como principales afectados, aunque durante este tiempo pueden encontrarse con algunos usuarios que necesiten resolver algunos certificados en la práctica recreativa como los pasavantes de navegación con los que se autoriza la actividad, un trámite que hoy por hoy sólo se puede realizar de forma física.

Según José Ignacio Llorca, presidente de la federación de cofradías de la provincia y patrón mayor de Villajoyosa, la dinámica es que la administración electrónica vaya ganando terreno, y en el caso de su municipio el distrito cerró hace más de un año pero no han valorado efectos negativos porque consideran que desde la cofradía se han adaptado a la vía telemática y casi todos los trámites de los particulares los resuelven de esa manera, aunque reconoce que cada cofradía decide la forma de comunicarse con la Administración.

Una plaza en trámite

Para revertir el problema de los cierres eventuales y ser más ágiles, Fomento publicó un concurso de traslados hace más de un mes para cubrir la plaza de jefe de distrito, tal y como solicitó hasta en tres ocasiones la Cofradía de Pescadores, apoyada por el Ayuntamiento, y en los últimos días se hizo efectivo el listado definitivo con cuatro aspirantes, de los cuáles uno pidió en primera opción ocupar el puesto de jefe de distrito en Santa Pola, y el resto prefirieron Alicante y Torrevieja, por lo que queda esperar que se adjudique formalmente el puesto. Desde la Capitanía Marítima aventuran que hay posibilidades de que salga otra convocatoria para cubrir más puestos de administrativo, de los que se podría beneficiar Santa Pola.

Por otro lado, confirman que desde la jubilación del responsable del distrito, en diciembre, el puesto ha estado en manos de una jefa de distrito provisional, aunque trabaja de forma remota desde Alicante. Descartan que el municipio vaya a estar desatendido todo este tiempo porque además destacan que el 90% de la documentación es viable que pueda resolverse por la vía telemática. Insisten, además, en que se ha articulado un protocolo para que la Cofradía gestione la documentación y sea este ente quién lo derive a Alicante para aliviar a los pescadores.

La Cofradía de Pescadores plantea remodernizar las instalaciones del distrito marítimo para hacerlo accesible

Al margen de la falta de personal en el distrito marítimo de Santa Pola, el edificio en el que se presta el servicio, propiedad de la Cofradía de Pescadores, tiene un estado deteriorado debido al desuso en el que se encuentra y a los sesenta años que se cumplen desde su contrucción.

La idea de la Cofradía es remodernizar este inmueble de cuatro plantas y ático para que sea más cómodo para el personal, y sobre todo gane en accesibilidad, teniendo en cuenta que no tiene ascensor y muchos usuarios tienen limitaciones para subir a resolver trámites. Sin embargo todavía no quieren adelantar plazos de inicio de las obras ni cuánto costará esta inversión. Señalan que la idea será esperar que terminen las obras de la recepción de carros de la lonja así como de las oficinas que hay situadas encima de la pescadería, que comenzaron hace unos meses, para ejecutar las del distrito, por lo que el personal se desplazará de manera provisional a estas nuevas oficinas. Desde la Capitanía Marítima desconocen también cómo serán estas obras y de qué manera se trasladarán equipos, pero señalan que se tendrá que trabajar también por preservar el archivo histórico para que no se deteriore al salir de las instalaciones, ya que en los últimos años hay usuarios que quieren recuperar documentos históricos como libretas de inscripción marítima que pueden datar desde el 1936.