Un incendio arrasó ayer una fábrica de reciclaje de caucho de Crevillent, calcinando los cerca de 1.000 metros cuadrados con los que contaba la nave y generando una gran columna de humo. El siniestro obligó a movilizar a una veintena de bomberos y, tras más de siete horas de trabajos, los efectivos del Consorcio Provincial lograron extinguir por complejo el fuego. Los bomberos lo dieron con terminado a las 18.30 horas, tras evitar que se propagara a otras naves del polígono 1-8, junto al de Cachapet.

Una vez que los bomberos dieron por controlado el incendio, evitando que se propagase a una segunda nave de la misma fábrica con maquinaria, varios efectivos empezaron a retirarse regresando a sus bases. No obstante, en la zona se dejó un retén fijo con un vehículo autobomba y una nodriza, para dar soporte a las tareas de extinción, que continuaron en la zona hasta que se dieron por extinguido a las 18.30 horas.

Hasta la zona del siniestro se llegaron a trasladar siete vehículos entre autobombas, nodrizas y una autoescalera. Esta última fue de mucha ayuda para frenar el avance de las llamas en el interior de una nave que quedó totalmente destrozada por el fuego. El suceso generó una gran columna de humo negro visible desde varias localidades del sur de la provincia.