El Sindicato Independiente de Trabajadores de la Administración Pública (SITAP) plantea acudir a la Fiscalía para investigar el transcurso de pruebas que se están realizando en Santa Pola para optar a la plaza de inspector de policía local. Precisamente un día después de que el sindicato de Policías Locales de la Comunidad Valenciana (SIPOL) anunciase que dos opositores habían remitido escritos de recusación contra el tribunal que compone estas pruebas, es ahora esta fuerza sindical la que denuncia presuntos tratos de favor hacia uno de los candidatos, ya que ayer se desarrollaron la tercera fase de las pruebas y éste opositor ha obtenido una nota muy distante del resto de candidatos, según la información a la que ha podido acceder este sindicato. El examen era tipo test de conocimientos jurídicos con 125 preguntas y hoy a las 10 horas será la prueba cuarta en la que sólo concurrirá este aspirante, después de que ayer quedaran fuera del proceso cuatro aspirantes al no resultar aptos.

Acciones legales

Desde el SITAP exponen que les resulta sorprendente que la diferencia en la calificación obtenida por el único aprobado y el resto de opositores sea tan sumamente grande, por lo que anuncian que el gabinete jurídico del sindicato está estudiando la posibilidad de emprender acciones legales para comprobar si ese proceso selectivo «ha sido tan libre como han querido revestir desde los Servicios Jurídicos Municipales», denuncian, ya que al hilo explican que una parte de la plantilla local ya auguraba que sería este candidato el elegido por acta notarial.

Explican desde el sindicato que hace un par de años esta misma plaza de Inspector quedó desierta en promoción interna, ya que desde el Ayuntamiento «se valoró que los propios funcionarios del cuerpo policial no estaban cualificados, procediéndose a denunciar sindicalmente la participación de un psicólogo contratado discrecionalmente por el Ayuntamiento».

Desde el SITAP van más lejos y creen que tribunal podría no ser imparcial para «regalarle la plaza a quien hoy es el único aspirante que queda en el proceso selectivo que se está llevando a cabo». Critican, además, que este proceso se esté desarrollando «con suma celeridad» agotando los tiempos entre prueba y prueba, un aspecto que también denunciaba el SIPOL, que destacaba que los tiempos de 48 horas entre prueba y prueba no se estaban cumpliendo.