La Sección Séptima de la Audiencia Provincial de Alicante, con sede en Elche, ha aplazado hasta el 17 de junio el juicio por el caso de presunta apropiación indebida que denunciaron varios miembros de la Cofradía de la Dolorosa de Santa Pola después de que varios cofrades fueran agraciados en 2011 con un premio de cinco millones de euros de la Lotería Nacional. El juicio se reanudaba ayer tras un aplazamiento previo en febrero, cuando una de las abogadas de la defensa solicitó la suspensión por enfermedad.

El juez ha estimado aplazar hasta mediados de junio la sesión para estudiar cuestiones previas con tal de dictaminar si se cambia o no el tribunal, ya que han habido alegaciones para que dos de los magistrados se abstengan en el procedimiento por conocer sobre el caso, ya que previamente dictaron un auto por el que declaraba socios a los denunciantes y se podría considerar que ya no pueden ser imparciales.

Por tanto, tendrá que resolverse si se cambia o no el tribunal de cara a la próxima sesión prevista para el 17 de junio. Por otra parte, la defensa pide el archivo de la causa porque, según explica, no puede haber una acusación particular si no popular, y que por tanto los denunciantes no pueden formar parte de esta situación, «porque hablan de una apropiación indebida en la que ellos entienden que no son perjudicados porque en todo caso sería la cofradía de la Dolorosa, que no está personada y no hay acusación del Ministerio Público contra ella, al no ver delito alguno», ha expuesto una de las abogadas de la defensa. Estos letrados expusieron ayer que tienen pruebas que acreditan que los denunciantes ya no eran cofrades en los últimos tiempos y de que se han manipulado pruebas documentales, algo que descarta la acusación particular, que sin embargo insiste en que faltan algunas pruebas como el libro de actas original de la cofradía, ya que las que se aportaron en su día son fotocopiadas y hay páginas poco legibles. Los letrados de la acusación particular denuncian que tampoco está testimoniado el referido documento de la entidad religiosa, incluso alguno de los denunciantes reseñan que las diligencias apuntan a 51 folios útiles y sellados de documentación, y consideran que faltan folios en la investigación judicial. Así las cosas, la primera sesión quedará emplazada para el 17 de junio, donde tendrán que acudir de nuevo los diez acusados. La siguiente será el 28 de junio donde están citados a declarar los denunciantes, por lo que la cita prevista para el 20 de mayo se suspende. Las siguientes sesiones, con testigos, llegarán en julio.

Un pueblo enfrentado

Las consecuencias de este juicio han enfrentado a cerca de 200 cofrades de Santa Pola. La vista llega tras ocho años de cruce de acusaciones entre los dos bandos de la cofradía: los que cobraron el premio por la llegada de la crisis económica pese a prometer en un principio que se destinaría a fines sociales, y la treintena que se quedó fuera del reparto, de los cuales ahora diez reclaman que se devuelva el dinero a las arcas de la entidad para cumplir la finalidad de los estatutos.