La fachada marítima de Santa Pola volverá a regenerarse de nuevo después de la degradación actual que sufre el entorno por los coches que van aparcando a lo largo del año en lugares no permitidos. La concejalía de Sostenibilidad ha comenzado estos días una campaña de reforestación al margen próximo al mar en la carretera del Cabo para cerrar el tráfico en los accesos irregulares por donde se colaban los vehículos. Las actuaciones han comenzado en la Cala dels Gossets donde se han plantado 200 ejemplares autóctonos como el lentisco, pino carrasco o Palmito para crear una barrera vegetal, y también se han retirado 10 toneladas de escombros. Próximamente seguirán reforestando la zona hasta llegar a la altura de las instalaciones del Centro de Investigación Marina (CIMAR),a más de medio kilómetro de distancia de la citada playa. Desde el área de Sostenibilidad indican que los senderos que dirigen a la playa se han mantenido y seguirá habilitado el parking frente a la cala, precisamente en un enclave en el que ya se actuó hace meses, señalan, donde se realizó una campaña de reforestación en la que han sobrevivido la mayoría de plantas, según las comprobaciones de los técnicos.

El Consistorio intenta poner freno a la cantidad de vehículos que se introducen en la vegetación del Cabo y que destrozan parte de la biodiversidad, un problema constante en el lugar por la fuerte presión de turistas.