Las playas de Santa Pola mejorarán sus servicios para reducir situaciones como inundaciones en las calles próximas al litoral. Para ello, la concejalía de Playas mantendrá reuniones periódicas con otras áreas como Deportes u Obras para coordinar el trabajo y poner remedio de manera más rápida a problemas que se repiten en la villa marinera. Mejorarán, por ejemplo, la inclinación de la arena para que descienda hacia el mar de manera que cuando llueva, el agua discurra sin obstáculos y se eviten calles anegadas. Con esta medida buscan desde el gobierno local disminuir los charcos que se forman en torno a los lavapiés, sobre todo en la zona de Gran Playa y Playa Lisa en temporada estival que han sido criticados por la ciudadanía en varias ocasiones.

Las mejoras comenzarán en la playa de Tamarit, donde ya se están retirando las pasarelas y próximamente continuarán con los lavapiés y los juegos deportivos, avanzan desde el cuatripartito. Una vez que todos los obstáculos estén retirados, Urbaser usará la máquina «retovato» para arar, remover y airear la arena para retirar el apelmazamiento en la playa con tal de evitar la propagación de bacterias que se crean por la humedad que contiene la arena.

Así las cosas, desde la Concejalía de Playas explican que la posidonia que deposita el mar en la orilla permanecerá sin recoger para evitar la pérdida de arena en las playas y contribuir a la protección del ecosistema del litoral.