Santa Pola experimenta cuando llega el verano cómo su población se multiplica, lo que el Ayuntamiento compensa con un despliegue mayor de seguridad, con agentes que se ocupen de funciones esenciales, como regular el tráfico en puntos críticos o controlar las playastráfico playas. Al comienzo de la temporada estival se contrataron a doce policias locales en régimen de interinidad que cubren en tres patrullas los 11 kilómetros de costa.

Sin embargo, desde la Policia Local señalan que durante el día están teniendo complicaciones para organizar controles rutinarios, como los de alcoholemia y drogas porque tan sólo hay un oficial por turno que coordine tanto a las seis patrullas ordinarias que hay en el núcleo urbano y en Gran Alacant, como también en las playas, «con lo cual nos tenemos que ceñir a los avisos, llamadas y requerimientos», explica uno de los oficiales.

Los sindicatos policiales consideran que sería beneficioso reactivar el servicio de unidad marítima para, por un lado, tener un oficial que coordine sólo el servicio de playas; y, por el otro, que haya mayor cobertura a la hora de prestar ayuda a embarcaciones o servir de apoyo a otros cuerpos, como Salvamento Marítimo.

Desde 2015 Santa Pola no tiene esta unidad especial que estuvo activa en 2013 y 2014 y que cubría la costa con dos embarcaciones zodiac a motor. Ese mismo año el pleno votó por mayoría, con la oposición del PP, suprimir la unidad marítima porque consideraban que la competencia en el mar no era de la Policia Local y económicamente no era asumible por el Ayuntamiento. En el citado pleno, la alcaldesa, Yolanda Seva, afirmó que se llegaron a pagar 17.000 euros por horas extras los fines de semana, porque el horario era de lunes a viernes. Aún así, la puerta a este servicio no quedó del todo cerrada y el gobierno local consideró que se estudiaría activarlo de nuevo pero diseñado con unas condiciones más efectivas y que no tuviera en contra a los sindicatos. En la actualidad, el ejecutivo local se desmarca de incorporar este servicio e insisten en que el Ayuntamiento no tiene atribuciones en el mar y «ya hay un servicio de Salvamento Marítimo que se presta por parte de Cruz Roja y la Guardia Civil», asiente Yolanda Seva.

Sin embargo, los agentes encargados de controlar las playas sostienen que apenas se producen incidentes en la arena, pero tienen limitaciones para detectar, por ejemplo, infracciones que se puedan producir dentro del mar, con usuarios que utilizan lanchas motoras. Sin la unidad marítima, que en su momento estuvo instalada en el puerto, alegan que se pierde capacidad de reacción para prestar asistencia previa a embarcaciones o controlar mejor la pesca ilegal, ya que sin embarcación propia no pueden acceder a puntos rocosos en extremos como la Playa del Pinet.

Litoral

Estos doce policias que cubren el litoral serían el único refuerzo en verano, a pesar de que hayan entrado en el cuerpo en el último año diez agentes en comisión de servicio; es decir, que tenían asignada su plaza en otros municipios y solicitan trabajar en para Santa Pola. El control de las riberas se hace desde la arena con un vehículo especial con el que recorren desde la Cala de La Ermita hasta la Goleta, en un servicio que arranca a las 10 de la mañana hasta las ocho de la tarde, con parón de dos horas al mediodía.

En cuanto al horario establecido, desde la Policía Local advierten que se pierde efectividad fuera de esas horas porque las patrullas ya no van por el interior de las playas y es precisamente a primera hora de la mañana y última de la tarde cuando pueden producirse más infracciones, como usuarios que pescan en zonas no habilitadas o botellones en los espigones.