Apuesta por la tecnología más innovadora en Crevillent. Durante toda la semana un grupo de veinte adolescentes del municipio, entre diez y doce años, se sumergieron en el mundo de la robótica. En este taller, organizado por la Concejalía de Cultura, los jóvenes experimentaron la diversidad que comprende este mundo de engranajes que pueden dar como resultado una máquina capaz de programarse para que interactúe con objetos y que, de alguna manera, imite el comportamiento humano o animal. Durante este taller práctico, celebrado en la biblioteca Enric Valor, los participantes descubrieron a través de una serie de instrucciones del programa informático que los ingredientes para diseñar estas máquinas son la informática, electrónica, mecánica o ingeniería. Estas disciplinas deben combinarse para dar un buen resultado, es decir, que el objetivo final sea construir dispositivos que funcionen de manera automática y que realicen trabajos dificultosos o imposibles para los seres humano.