Después de meses de espera y largas negociaciones, los presupuestos municipales de Crevillent salieron el lunes adelante en el pleno ordinario y lo hicieron en tercera votación con el voto de calidad del alcalde, César Asencio, ya que los únicos votos favorables fueron los de la bancada popular, con la abstención de Ciudadanos y de la concejal no adscrita, además del voto negativo de Compromís, PSOE y l'Esquerra.

El presupuesto asciende a 25.205.963,39 euros, un 4,5% más con respecto al ejercicio anterior, modificado para cumplir con el techo de gasto, después de presentarse el borrador a los grupos políticos el pasado mes para que pudieran estudiarlo y presentar enmiendas.

Asimismo, se ha ajustado la inversión en partidas como la adecuación de los campos de fútbol del municipio, que tendrá una diferenciada en dos anualidades en lugar de una. Al tratarse de un Gobierno en minoría, el del PP, las cuentas han salido adelante a base de negociaciones, un año más, del Ejecutivo local con el grupo de Ciudadanos, que decidió abstenerse en la consulta porque 16 de las 30 enmiendas que plantearon y que fueron incluidas en el anterior presupuesto siguen sin ejecutarse.

Sin embargo, el portavoz de la formación, José Javier Soriano, señalaba que el Ejecutivo se compromete a hacer efectivas este año las medidas que ya pusieron como condición, como la reducción del IBI de 350.000 euros para ayudas que irán a Bienestar Social o la reducción de la tasa de basuras, por lo que, «aunque hay cosas que no nos gustan, las mejoras se hacen con actos y no con noes», apuntó.

En ese paquete de medidas por ejecutar también han presentado 13 nuevas propuestas, la mayoría incorporadas al presupuesto, como la continuidad del plan de accesibilidad universal, la creación de un campo de fútbol en San Felipe o la adquisición de vehículos eléctricos.

El equipo de gobierno apunta, además, que la mayoría de enmiendas planteadas por la concejal no adscrita, Lelia Laura Gomis, como el arreglo del estanque Parc Nou o la adaptación de juegos para personas con movilidad reducida encajarían en el presupuesto dentro de las partidas que ya hay diseñadas.

Durante el debate, el portavoz socialista, Javier Asensio, dejó claro que votaban en contra de estos presupuestos porque no se ha tenido en cuenta ninguna de las propuestas que han presentado, muchas de ellas rechazadas también el año anterior y otras, sin embargo, que tenían partida y «se han eliminado produciéndose un incumplimiento total para ejecutar proyectos como la oficina municipal de vivienda o la adquisición de mobiliario para la Escuela de Hostelería», apuntó.

Desde Compromís se mostraron contrarios al presupuesto, «por estar fuera de plazo y cerrado sin capacidad de negociación, y no presentamos enmiendas porque las tiran a la basura», sentenciaba Jesús Ruiz, portavoz adjunto. En la misma línea, Josep Candela, de l'Esquerra, rechazaba esta propuesta en la que, dice, sigue imperando la privatización de los servicios y «ya estaba todo pactado con Ciudadanos».

Por otro lado, se votaron a favor mociones como la de Compromís para garantizar la cotización a la Seguridad Social de cuidadores no profesionales y se tumbaron otras, como la del PSOE para pedir la dimisión de Manuel Moya como concejal de Deportes.