La Asociación de Comerciantes de Santa Pola vuelve a salir a la calle para protestar contra el plan de humanización en marcha desde hace tres semanas en la localidad.
A las 21 horas ha comenzado una marcha desde El Palmeral en la que se encuentran empresarios de la villa marinera, vecinos y simpatizantes para recorrer calles del centro hasta llegar a la Glorieta y realizar una sentada. Más de 200 personas se contaban al inicio de la marcha en el parque de El Palmeral, en la protesta organizada por la Asociación de Comerciantes de la villa marinera. En la protesta también tomaron parte vecinos y propietarios de algunos puestos de los mercadillos santapoleros
La presidenta de la Asociación de Comerciantes de Santa Pola, Pepa Garri, en la que se ha convertido la segunda protesta en este mes contra el plan de humanización, pidió que reinara el "respeto y la cordura" durante este acto. Así, ataviados de nuevo con camisetas con el lema "Stop Humanización Santa Pola" , con pitos y cantos pidiendo el freno de la peatonalización, los manifestantes marcharon tras una nueva pancarta en la que se podía leer "No a la improvisación", "Sí al diálogo, no a la imposición", "Sin comercio no hay ciudad" y "Acceso a residentes y proveedores".
Estos mensajes son las reivindicaciones que los empresarios reclaman al Ayuntamiento de Santa Pola para que frenen una peatonalización que no consideran adecuada. Además, los integrantes de la marcha repartieron folletos en los que se anunciaba la próxima marcha convocada y los motivos por los que se oponen al plan que lleva a cabo el Ayuntamiento.
Garri aseguró que "creo que son muy desagradables las palabras del concejal de Infraestructuras de Santa Pola por las que nos ha tachado de coaccionar a otros comerciantes a que se unan a nuestras reivindicaciones y nos acusa de tener modos dictatoriales en las peticiones".
La siguiente marcha está programada para el viernes siguiente, el 28 de julio, a las 21 horas en un recorrido que irá por el parque de El Palmeral, pasando por las calles Marqués de Molins, Glorieta y Muelle y acabará con otra sentada, esta vez frente al Ayuntamiento.
Los comerciantes mantienen que el Consistorio no ha tenido en cuenta la opinión de los residentes, propietarios y veraneantes a la hora de llevar a cambio el cambio en las vías. Los empresarios consideran que «han hecho caso omiso al plan de transparencia y de participación ciudadana».
Además, apuntaron a que tienen dudas sobre si se ha realizado algún estudio socioeconómico en el que se amparen los cambios, y también sobre si la información de las novedades y el cierre de calles ha sido insuficiente, y proponen como alternativa que se abra el tráfico por la mañana y que se cierre por la tarde.
El lunes 10 de julio, cerca de 300 comerciantes y vecinos de Santa Pola ya se manifestaron para pedir el freno de este proyecto y denunciaron que, desde que se implantó, los establecimientos han sufrido un 20% de pérdidas económicas en sus negocios.
Por su parte, el Ayuntamiento de Santa Pola ha incorporado nuevas señales verticales de información, regulación y seguridad vial en los alrededores del Mercado Central.
