El Ayuntamiento de Santa Pola presionará al Consell para que tome cartas en el asunto para incrementar el parque inmobiliario de viviendas sociales con las que cubrir las necesidades de los santapoleros con más problemas de recursos económicos. El Consell ya no ejecuta pisos de este tipo de nueva construcción y, por ello, está rehabilitando edificaciones ya construidas para reconvertirlas.

El concejal de Acción Social, Lorenzo Andreu, afirmó que esta petición se ha convertido en el «caballo de batalla del Ayuntamiento en el Consell», para que pongan el ojo en Santa Pola y den un empujón a esta práctica desde València ante el aluvión de peticiones de ayuda que no pueden ser atendidas por la carencia de pisos para el alquiler social. «Se está rehabilitando parque público y hemos pedido que también lo hagan en Santa Pola, a ver si nos escuchan», puntualizó.

Durante el mes de junio, a base de mantener reuniones con la directora territorial de la Conselleria de Vivienda y Obras Públicas, Helena Beunza, han conseguido que se rehabilite un piso en Santa Pola en el que ya está viviendo una familia que la necesitaba, según los datos de Acción Social. Recientemente, se reubicó a otras personas desahuciadas en otro piso disponible, pero todo llega por goteo. Además, queda otra vivienda más por adjudicar de forma inminente, pero aún está en el aire la fecha en la que se pueda considerar como completamente habitable.

Lorenzo Andreu también afirmó que el Ayuntamiento está presionando para que el Consell saque adelante la anunciada Ley por la Función Social de la Vivienda de la Comunidad Valenciana, que, entre otros puntos, supondría la colaboración con las entidades financieras, filiales inmobiliarias o entidades de gestión de activos a la Generalitat. Santa Pola fue declarada como municipio libre de desahucios en enero de 2015. A pesar de ello, se siguen produciendo lanzamientos de vivienda, subastas, y otras acciones que afectan a toda la ciudadanía.

Así, el problema de los suministros en las viviendas sociales es uno de los asuntos enquistados dentro de las reuniones del Ayuntamiento de Santa Pola con el Consell. De hecho, han detectado que en Santa Pola, muchas del aproximadamente medio centenar de viviendas de alquiler social en las que los bancos han realojado a familias que perdieron su lugar de residencia, no contaban con los requisitos legales para la obtención de los suministros de luz y agua, al no poder tramitar la licencia de ocupación de la vivienda en la villa.

De esta forma, la tendencia es que las familias con problemas habitacionales se instalen a vivir en casas que son propiedad de entidades bancarias y que permanecen vacías. Es un asunto que gestionan desde la Oficina de Intermediación Hipotecaria del Consistorio y la obra social de la Plataforma de Afectados por la Hipoteca (PAH). Crecen las reuniones con bancos, las bases para establecer acuerdos con SUMA para el ejercicio de pagos, avances para crear un registro de viviendas vacías en el municipio, la notificación del pago del IBI a las viviendas cuya propiedad sea de los bancos, la promoción de los alquileres sociales,las daciones en pago y la lucha contra las cláusulas suelo, entre otras medidas.