Un Guardia Civil fuera de servicio propició la detención de un conductor el pasado martes en Santa Pola. El agente, que circulaba con su vehículo particular, observó que otro coche daba marcha atrás por el carril contrario para evitar un control que estaban realizando sus compañeros en la CV-865 sentido Santa Pola, en la rotonda del polideportivo de Els Xiprerets. Lejos de dejarlo escapar, lo siguió hasta que, en un punto limpio cercano, fue a dar la vuelta para huir definitivamente. El infractor se dio cuenta de la presencia del Guardia Civil y emprendió de nuevo la marcha, por lo que llamó por teléfono a una patrulla para solicitar refuerzos en el seguimiento.

El detenido, según informa la Benemérita, realizó diversas maniobras irregulares y excediendo de la velocidad permitida. Tras arrestarlo, el conductor manifestó que se había dado a la fuga al carecer de carné de conducir. El coche, al parecer, era de su novia.