Santa Pola ha hecho historia. Contra todo pronóstico y ante la incertidumbre de todo un pueblo hasta el mismo instante del acto de investidura, la socialista Yolanda Seva se convirtió ayer en la primera mujer alcaldesa de la localidad costera.

Un cambio trascendental para la villa marinera que ha pasado a la lista de municipios con un gobierno de coalición. Pero, lo más inaudito es que Santa Pola tendrá un equipo de gobierno liderado por cinco partidos políticos.

Con el Partido Socialista a la cabeza, seguido de Compromís, Ciudadanos, EU y Sí Se Puede, el Ayuntamiento ha cambiado de color para dejar atrás doce años de mayoría absoluta del PP.

Así, la toma de posesión de la nueva corporación municipal se convertía ayer en todo un sinfín de emociones, pero también de tensión. Y es que, la sorprendente postura de Ciudadanos fue determinante para sacar a los populares del equipo de gobierno.

Los dos votos a favor del PSOE de la formación liderada por Ignacio Soler fueron un jarro de agua fría para el PP. Esos dos apoyos más el respaldo de toda la izquierda fueron suficientes para desbancar a Miguel Zaragoza.

De esta manera, los once votos a favor de Yolanda Seva se impusieron a los nueve que se postularon por el líder popular y a una abstención, realizada por parte de un concejal de Ciudadanos.

Así quedaba ayer materializado el nuevo gobierno santapolero. Un pentapartito que declaró tener claro la necesidad de gobernar con el pueblo en pro de la participación ciudadana. «Esperamos demostrar que estaremos a la altura de este enorme reto. Como primera mujer que alcanza esta responsabilidad tengo la firme convicción de que existe una forma diferente de hacer las cosas. Visca Santa Pola». Con estas palabras, la nueva alcaldesa cerraba ayer su discurso de agradecimiento, tras recibir el bastón de mando de la localidad.

«Nos negamos a volver escuchar que Santa Pola está muerta, vamos a empezar a tomar ya decisiones, Santa Pola necesita una inyección, ilusionar a los inversores, recuperar a los jóvenes y apoyar nuevas iniciativas», clamó Yolanda Seva.

Sonrisas y lágrimas

Pasadas las 11.30 horas, la villa marinera escribía ayer un nuevo capítulo de su historia y con nombre de mujer. Sin embargo, la incertidumbre sobre el futuro del Ayuntamiento se mantuvo prácticamente hasta el mismo instante del nombramiento. El golpe de mando de Ciudadanos, que rompió con la disciplina de partido fue clave, pese a haber recibido presiones del PP, pero nunca de Zaragoza hasta la una hora antes del acto, según aseguró Soler. Con la toma de posesión y la jura de cada concejal, llegó el momento cumbre del día. Los aplausos y también alguna lágrima de alegría y de tristeza inundaban el salón de plenos y la planta baja del Consistorio donde vecinos siguieron el acto por las pantallas. La salida del Ayuntamiento de Zaragoza, que recibió el cariño de algunos seguidores, fue otro de los instantes emotivos del día. Sin embargo, el saludo de la nueva corporación y su pentapartito desde el balcón del Consistorio dejó una imagen insólita.