La villa marinera vive pendientes de que las obras de la estación pudieran comenzar esta primavera, tal y como anunció el Ayuntamiento. Sin embargo, ahora, los trabajos para edificar la esperada infraestrutura tienen una nueva fecha.

Santa Pola ha pospuesto la construcción de la nueva terminal a mitad de septiembre. Desde el Consistorio apuntaron que las obras no pueden comenzar todavía porque la normativa municipal impide realizar movimientos de terreno en el casco urbano durante la temporada alta estival. De esta forma, los santapoleros tendrán que esperar un mes más para ver si se cumplen los plazos.

No obstante,la concejal de Urbanismo, Lola Gadea, ha asegurado que la estación de autobuses ya ha conseguido la licencia de obras.

Fue en mayo cuando los terrenos que albergarán la ansiada infraestructura acogieron las catas previas a la construcción de la terminal. La actuación consistió en evaluar las características de la zona con una superficie de 10.237 metros cuadrados.Sin embargo, desde entonces la parcela, que recientemente ha cambiado de cartel, ha quedado desierta a la espera de que las máquinas vuelvan a tomar los terrenos.

Características

La estación de autobuses de Santa Pola, cuyo proyecto se ha adjudicado a la empresa Autobuses Playa de San Juan, perteneciente al grupo Vectalia y tiene un plazo de ejecución de 15 meses. La estación contará con una zona de espera acristalada, aclimatada y cubierta, al igual que ocurrirá con las dársenas donde estacionarán los autobuses.Asimismo, las zonas verdes y ajardinadas se van a convertir en las principales protagonistas de la construcción, ya que tendrán una extensión de 4.010 metros cuadrados. El área destinada a los aparcamientos también cobrarán especial importancia en el proyecto, con una superficie de 2.000 m2. Frente a ello, la estación ocupará un espacio de 790 m2, la estación de servicio y la tienda tendrán 1.300m2, al igual que el espacio comercial y de servicios.

Retrasos

El primer anuncio de las obras de la estación llegó en el año 2006. Posteriormente, el alcalde Miguel Zaragoza aseguró que los trabajos comenzarían en el 2009.El inicio de la crisis supuso un fuerte varapalo a la posibilidad de sufragar la terminal con fondos públicos y en 2011 el Ayuntamiento anunció que la obra sería construida por una empresa privada y explotada en régimen de concesión durante 20 años. El verano de 2011 fue otra de las fechas prometidas para el inicio de la edificación. De ahí, se pasó a octubre de 2013, pero los retrasos burocráticos y en el proceso de adjudicación volvieron ha acer imposible el comienzo.