Un movimiento sísmico de intensidad 3,2 en la escala de Richter, localizado en el mar a pocos kilómetros del cabo de Santa Pola, según datos aportados ayer por el Instituto Geográfico Nacional, se dejó sentir no sólo en la citada localidad, sino también en Alicante, Torrevieja, Mutxamel o Sant Joan d'Alacant.

El sismo se registró a las 16.13 horas. El epicentro se detectó a 8 kilómetros de profundidad y aproximadamente a unos diez kilómetros en el mar con respecto a Gran Alacant y cerca de Tabarca.

Precisamente, vecinos de Santa Pola, así como de Arenales del Sol (Elche) fueron los que notaron principalmente este pequeño terremoto, aunque según fuentes del Instituto Geográfico Nacional sus efectos también se dejaron sentir en Alicante y Torrevieja, así como en el Cabo de Palos (Cartagena).

No obstante, el temblor pasó ayer desapercibido para muchos ciudadanos, no sólo por su baja intensidad, sino también por su escasa duración, ya que se estima que apenas se percibió por espacio de 1,5 segundos.

En cualquier caso, el Centro de Coordinación de Emergencias, a través del teléfono 112, recibió siete llamadas relacionadas por este terremoto, según informó Europa Press.

El de la tarde de ayer fue uno más de los muchos que se han venido registrando en la provincia desde el pasado sábado. De hecho, pocas horas antes y muy cerca de allí, en la madrugada del lunes al martes, sobre la 1 de la mañana, la Unidad de Registro Sísmico de Alicante tuvo notificación de otro terremoto de 1,9 grados al este de Alicante. También en el mar y también con epicentro a unos 13 kilómetros de profundidad.

Pero es que además, entre el sábado y domingo pasados se tienen registros de hasta seis eventos sísmicos detectados, en este caso, en el Medio Vinalopó.

En concreto, el sábado a las 22.28 se tuvo constancia de un terremoto de magnitud 2,6 al este de Monforte del Cid. Casi media hora después se daba en el mismo lugar una réplica con la misma intensidad y sobre las 23.02 se producía un tercer terremoto, en este caso de 2,8.

Pasada la media noche se volvía a detectar un cuarto episodio, aunque en este caso al suroeste de Agost y de magnitud 1,8.

La madrugada del sábado al domingo no fue tranquila para algunos monfortinos porque a las 2.48 y a las 8.14 se sucedían otros dos nuevos terremotos, de 2,7 y 1,6 grados de intensidad, según la Unidad de Registro Sísmico de la Universidad de Alicante.

Por su parte, la zona de influencia de Santa Pola no era foco de movimientos sísmicos desde el pasado 30 de enero. En el movimiento registrado aquella jornada a las 22.13 horas la magnitud fue de 2,6, mientras que el terremoto de las 9.04 horas rebajó su fuerza a 2.