Cuatro pateras con unos 35 inmigrantes magrebíes llegaron en la madrugada de ayer a Santa Pola y a Tabarca sin ser detectadas inicialmente por el radar del Sistema Integral de Vigilancia Exterior (SIVE) instalado en el faro, que sin embargo ayudó luego con sus cámaras térmicas a localizar dos pateras y a detener a algunos de los 28 magrebíes capturados por la Guardia Civil y la Policía Local entre la una de la madrugada y la tarde de ayer. Los tripulantes, todos hombres y entre ellos tres menores, presentaban un buen estado de salud excepto tres que precisaron asistencia sanitaria. La Guardia Civil seguía anoche buscando a los siete huidos.

En sus conversaciones con los voluntarios de Cruz Roja que les asistieron aseguraron que llevaban un día en el mar después de que un barco nodriza que zarpó el sábado de la costa de Túnez con diez pateras les dejara a una distancia indeterminada de la costa alicantina, aunque los especialistas manejan que probablemente fuera a un mínimo de 40 ó 50 millas náuticas y que salieran de la costa argelina.

La Guardia Civil entregó a los inmigrantes a la Policía para realizar la identificación y los trámites de expulsión y uno de los arrestados está considerado presuntamente el patrón responsable de la oleada de pateras. En la patera de Tabarca iban cinco personas y en las otras tres diez tripulantes en cada una aproximadamente.

La agitada noche de búsqueda de inmigrantes comenzó sobre la una de la madrugada. A esa hora una patrulla de la Policía Local de Santa Pola sorprendió a varios magrebíes junto a una casa de la zona de Santa Pola del Este. Pensaban que salían de robar de una vivienda pero al interceptarlos comprobaron que estaban mojados y junto al paseo marítimo situado a escasos metros localizaron una patera de cuatro metros varada en las rocas y con el motor fueraborda en el agua. La Policía Local dio la alerta al resto de patrullas de guardia y avisó a la Guardia Civil que movilizó a efectivos del cuartel de Santa Pola y de la Unidad de Seguridad Ciudadana de la Comandancia.

Mientras realizaban detenciones y buscaban a los tripulantes de la primera patera, sobre las dos de la madrugada arribó otra a la zona del faro cuyo motor fue escuchado por uno de los agentes desplegados. Dos tripulantes fueron apresados al desembarcar de la segunda patera y el resto salió huyendo. A escasa distancia llegó una hora más tarde la tercera patera y al haber más agentes en el lugar lograron detener a siete de los diez ocupantes. A primera hora de la mañana vecinos de Tabarca alertaron de otra patera y una embarcación del Servicio Marítimo de la Guardia Civil se trasladó a la isla para detener a cinco inmigrantes y trasladarlos al puerto de Santa Pola.

Durante el resto de la noche y la jornada de ayer la Guardia Civil movilizó a numerosas patrullas para rastrear la zona y con la ayuda de la cámara térmica de la estación situada en el faro localizaron de noche a varios inmigrantes. El goteo de detenciones fue constante hasta llegar a 27 a media tarde. Los dos últimos detenidos llegaron a subir hasta la cima del faro. La Policía Local de Alicante, la Nacional de Elche y la Autonómica también colaboraron en el operativo.

La subdelegada del Gobierno, Encarna Llinares, aseguró que el SIVE ayudó a interceptar pateras y a detener a inmigrantes "guiando a las diferentes patrullas sobre su localización", aunque varias fuentes fidedignas consultadas por este diario señalaron que todas eludieron el radar. Los consellers de Gobernación e Inmigración, Serafín Castellano y Rafael Blasco, denunciaron la "pasividad" del Gobierno ante la llegada de nuevas pateras.