El Centre d'Estudis Contestans, con más de treinta años de historia, es un referente cultural de primer orden en nuestra Provincia. Desde 1988 publica la revista Alberri, que toma su nombre de una partida rural de Cocentaina, y de la que se han publicado 21 números, dando cabida a trabajos históricos, etnográficos y arqueológicos de gran dignidad.

En su última entrega, que acaba de aparecer, destaca un largo trabajo del profesor Primitivo Pla sobre el Poble Nou de Sant Rafel, hoy pedanía de Cocentaina pero que fue municipio independiente entre 1774 y 1845. ¿Qué puede aportar al conocimiento histórico la historia de un pequeño caserío de sólo dos calles, y con una población que no llega a los 40 habitantes? La respuesta nos la ofrece el profesor Pla en una investigación minuciosa que trasciende a lo local, ya que analiza, utilizando el modelo del Poble Nou, un fenómeno repoblador con efectos en tierras valencianas, e incluso en otros territorios de la antigua Corona de Aragón: los llamados señoríos alfonsinos.

En las Cortes valencianas convocadas por Alfonso IV en 1329 se aprobó un fuero que concedía la jurisdicción civil plena y la baja criminal a quien poblara un territorio con, al menos, quince vecinos cristianos y levantara igual número de casas. El privilegio fue utilizado como elemento colonizador y para lograr un mayor control de las alquerías musulmanas, y desarrolló sus potencialidades hasta la derogación de los fueros por Felipe V en 1707. Una Real provisión de 1772 restableció el privilegio, y de ella se valió el terrateniente alcoyano Rafael Descals para convertirse en señor de vasallos.

La familia Descals dominó, junto a los Sempere y los Merita, la vida municipal alcoyana durante el Setecientos. Destacados borbónicos, los Descals eran poseedores de un rico patrimonio inmobiliario, tanto en Alcoy como en Cocentaina y Jijona. Para alcanzar la nobleza no titulada, Rafael Descals, vio en la Real provisión de 1772 la oportunidad para ello mediante la fundación de dos poblaciones en La Sarga y en la partida de Penella, en Cocentaina. Esta segunda es la que posteriormente se convertiría en el Poble Nou de San Rafel.

El análisis de la Carta Puebla -una de las últimas firmadas en España- entre Descals y los 16 colonos que debían convertirse en los nuevos pobladores, constituye una de las partes más interesantes del trabajo. En sus 52 capítulos o cláusulas, los futuros colonos debían someterse a las condiciones impuestas por Descals a cambio de recibir algo más de 112 has. y un solar donde levantar sus casas. Quedaban limitados en su movilidad y comprometidos a fijar su residencia y entregar a su señor la tercera parte del grano, las legumbres, almendra, hojas de morera, uva y también un tercio del aceite obtenido en la almazara de los Descals.

Las casas existen, como está en pie la casa señorial y la ermita. Si paseamos por la calle Mayor o de San Rafael del Poble Nou, todavía es posible contemplar un vestigio fosilizado de un feudalismo tardío en nuestras tierras.