En apenas 24 horas, las medidas adoptadas por la Conselleria de Sanidad con la intención de contener el contagio del coronavirus en la capital de València se han quedado cortas y se han ampliado al resto de la Comunidad. El Ministerio de Sanidad, con el acuerdo unánime de la totalidad de las autonomías, urge restricciones más severas que entrarán en vigor «en los próximos días», en palabras de la propia titular de Sanidad, Ana Barceló.
«Damos un paso más en la prevención y contención el coronavirus y en la protección de toda la ciudadanía», sopesa la consellera restando importancia al hecho de que van más allá de lo decidido por su departamento pocas horas antes y que prohíben, entre otras cosas, fumar en la calle a menos de 2 metros de otra persona.
En materia de Salud Pública es «la primera vez en democracia de forma coordinada» que se adoptan medidas, según destaca el Ministro de Sanidad, Salvador Illa, que en lo relativo al ocio nocturno prescriben su cierre total. Illa precisa que es el origen de los brotes de coronavirus con mayor cantidad de casos asociados y complicados de seguir para controlar los contagios, de ahí el cierre de discotecas, salas de fiestas y bares de copas.
Los responsables sanitarios admiten que el ocio nocturno no es el principal foco de brotes, -sino las reuniones familiares y sociales que se reducen ahora a 10 integrantes-, pero que complica mucho más la identificación de los posibles contactos del contagio.
La consellera Barceló se limitó a restringir el ocio hasta las 1:30 en la ciudad de València y ahora el cierre será total y en toda la Comunidad, en cuanto «se adopten las decisiones correspondientes para la aplicación y entrada en vigor con todas las garantías jurídicas de todas las medidas aprobadas», dijo ayer la consellera.
Es la medida que mayor controversia genera entre el sector en la provincia, junto al cierre de toda la hostelería y la restauración a la 1:00 de la madrugada, no pudiendo admitir nuevos clientes más tarde de las 00:00 horas.
Drama
El presidente de la asociación de pubs y discotecas Ociobal en Benidorm, Victor Navarro, lo califica de «drama» para el sector y considera que estas restricciones «dan la puntilla final al turismo». La entidad aglutina a gran parte de los negocios de este tipo de la capital turística y su representante advierte que «vamos a estudiar y poner en manos de los letrados» este cierre. «Vamos a esperar a que se publique la orden y ver qué condiciones pone y qué dice exactamente», apunta al tiempo que sostiene que no lo ve como solución a la situación sanitaria actual. «La mayoría de locales ponen todas las medidas que se nos han exigido -insiste-. Hay alguno que no cumple, pero el resto sí».
En similares términos se pronuncia el presidente de la asociación de bares, restaurantes y cafeterías, Abreca. «En las zonas turísticas, a los locales con terrazas que trabajamos hasta las 1.30 horas nos machacan más si a las 00.00 tenemos que rechazar a los clientes. Este mes era para tirar de un carro que ya estaba perjudicado», lamenta Javier del Castillo. «Parece que ahora la hostelería tiene la culpa de todo y nos están poniendo una soga en el cuello», alerta.
La Asociación Provincial de Empresarios de Salas de Fiesta y Discotecas también teme que el cierre total del ocio nocturno sea la puntilla para un sector que da empleo a más de 2.000 personas, sobre todo para los locales más pequeños de la costa. Explican que apenas un 20% de estos negocios funcionan este verano ya que la mayoría optó por no abrir al estar reducido el aforo al 33% y sin poder utilizarse la pista de baile. La asociación calcula pérdidas de más del 70%, de ahí que auguren el final de cientos de establecimientos.
También la Federación Nacional de Empresarios de Ocio (España de noche) expresa su estupor y sorpresa por el cierre. Y para Javier Galdeano, portavoz de la asociación de locales de ocio y restauración de Alicante, es como volver a la fase cero y dramático para el sector, porque es de los más controlables. Plantea asimismo llevar el asunto ante el TSJ.
El alcalde de Alicante, Luis Barcala, pide por su parte el máximo cumplimiento de las nuevas medidas de Sanidad.
En la Vega Baja también barajan medidas jurídicas. El presidente de la asociación de Empresas de Hostelería de Torrevieja y Comarca (AEHTC), Joaquín Guillamó, lo considera un mazazo aunque los rebrotes relacionados con el ocio lo apuntaban. «Era presumible que esto pudiera llegar, pero veremos qué dicen los servicios jurídicos sobre el tema de los horarios», advierte.
Economía
Reconoce que es «muy complicado vigilar a todos los jóvenes, porque se han puesto hasta guardias de seguridad en las zonas de ocio en Torrevieja, pero la gente se mete por donde sea hasta saltando muros, y esa nula responsabilidad nos ha llevado a esta situación». Añade que a consecuencia del coronavirus se han quedado muchos locales por el camino, y que con estas medidas a otros no les quedará más remedio que cerrar, porque los hosteleros fuimos los primeros en cerrar con el confinamiento y los últimos en abrir». «Elegir entre salud y economía es muy complicado, porque son intereses contrapuestos, pero si no se mueve la economía también se pierden muchos puestos de trabajo», reflexiona.
Por su parte, el edil de Emergencias de Orihuela, Víctor Valverde, contempla las nuevas medias con «resignación», pese a que la costa oriolana se verá muy afectada. «Eran semanas claves para la hostelería y el ocio, después del confinamiento, y ahora se puede decir que pueden dar por finalizada la temporada», lamenta.
El sector de la hostelería de Elche opina que las medias son precitadas ante las múltiples reservas de las familias para celebrar hoy, 15 de agosto, el día de la Patrona, por si los restaurantes deben llamar a los clientes para avisar de que solo podrán ser diez personas máximo. Los asociados se suman a las protestas de la plataforma nacional de ocio nocturno y Francisco Javier Mora, presidente de la asociación de Hostelería de Elche, opina que la medida «debería haberse tomado solo en las comunidades con más contagios. Se han pasado extendiéndolo a todo el país», sopesa.
A estas medidas se suma la prohibición de fumar al aire libre si no se pueden guardar los dos metros de distancia, y se prescriben de forma obligatoria cribados de PCR en caso de brotes cercanos a colegios, centros sanitarios o bloques de viviendas. El ministro recuerda que el botellón está prohibido y que los ayuntamientos deben hacer cumplir las sanciones.
La presidenta del colectivo de médicos en la provincia, Isabel Moya, recuerda finalmente que todas estas medidas las reclamaron ya en los primeros momentos de la desescalada para controlar los contagios, por lo que ahora celebra que se adopten de forma general «con unidad de criterio».
Cierran dos locales en la Vega Baja por el coronavirus
Dos locales de restauración han tenido que cerrar en la Vega Baja en esta semana tras dar positivo en covid-19 algunos de sus empleados. Se trata de un conocido local de comida y copas de Campoamor en Orihuela Costa y de una franquicia de comida en Torrevieja. En el caso de Campoamor, el establecimiento se encuentra cerrado tras el positivo de dos de sus trabajadores, que son pareja. Así lo ha anunciado el propio establecimiento, Shangrila Klub, en sus redes sociales. Toda la plantilla se encuentra en aislamiento domiciliario y va a ser sometida a las pruebas PCR. Estos positivos se suman a un tercero en Campoamor, el de una vecina de Madrid que se sometió al test tras pasar las vacaciones en Orihuela Costa. El edificio ha sido desinfectado. En Torrevieja, se encuentra con la persiana bajada la franquicia de 100 Montaditos en el centro de la ciudad. En este caso fue un trabajador el que dio positivo y, como en el otro local, el resto de empleados está en cuarentena.
