El curso académico 2020-2021 se inaugurará en lo que se prevé un otoño caliente de rebrotes, posibles segundas oleadas de contagio y cambios sociales y tecnológicos. Ante ese escenario, las universidades públicas de Alicante quieren mandar un mensaje claro: creen en la enseñanza presencial y en la movilidad de estudiantes y profesorado y quieren seguir apostando por ellas aún en la era del covid-19.

Esta determinación está matizada por los requerimientos de la resolución sobre medidas de prevención frente a la covid-19 dictada el sábado por la Conselleria de Sanidad Universal, que exige a las universidades la elaboración de protocolos para garantizar la seguridad y la enseñanza a partir del 1 de septiembre.

Este escenario marcó la charla que mantuvieron ayer los máximos dirigentes de la UA y la UMH en el Club INFORMACIÓN, Manuel Palomar y Juan José Ruiz, ante una audiencia compuesta fundamentalmente de personal docente y administración de ambos campus. El coloquio, moderado por el director del Club, Toni Cabot, abordó cinco puntos relacionados con la seguridad de alumnos y profesores, la ordenación de la docencia, la movilidad internacional, la implementación de tecnologías y la investigación.

Seguridad

Palomar inauguró el turno de palabra recordando el esquema normativo sobre el que se está construyendo el protocolo de la UA. «El 18 de julio se dictaron una serie de normas que permiten elaborar ese plan de contingencia. Ahora nos coordinamos las cinco universidades valencianas para llevar a cabo ese protocolo», aclaró el rector, quien espera poder presentar el plan a la comunidad universitaria «a finales de julio». La salud y especialmente la gestión de «síntomas, casos y brotes» es la premisa básica de la reapertura universitaria para el dirigente académico.

Sin aclarar qué parte del protocolo será común a todas las universidades y qué parte desarrollada por cada campus, Palomar expuso su interés en realizar tanto tests rápidos como PCR en la propia UA, a fin de poder distinguir síntomas de covid-19 de gripe común y así aislar positivos con rapidez. Para esta medida pidió el apoyo de la propia Conselleria de Sanidad Universal. Ruiz expondría más adelante su interés por encontrar los tests más eficaces.

Ambos rectores señalaron que van a contar con herramientas informáticas de trazado de casos, pero con diferente enfoque: el rector de la UA destacó que las entradas en las aulas solicitarán un registro vía código QR mientras que la UMH desarrolla una app de aviso si algún miembro de la comunidad ha estado en contacto con un positivo. Ambos campus contarán con planes específicos en caso de que «haya que cerrar aulas o edificios», como avanzó Ruiz. En el coloquio coincidieron en que «el reto ahora es hacer llegar todo esto a los estudiantes», ya que sólo dispondrán del mes de agosto para conocer los planes y tomar decisiones.

Enseñanza dual y movilidad

Para planificar la enseñanza cuando «la única certeza es la incertidumbre», como señaló Palomar, y tras la experiencia en «simultaneidad de la docencia» adquirida en la cuarentena como destacó Ruiz; se ha optado por una visión dual de la docencia: preferiblemente presencial pero capaz de desdoblarse online si la situación lo requiere. «Dual, híbrida o mixta, hablamos de modalidades online-offline que puedan aplicarse a escenarios de máxima o mínima presencialidad», señaló el rector alicantino.

Ruiz recordó que la resolución de Conselleria aumenta el aforo máximo de las clases hasta el 75% de su capacidad y que su enfoque es «buscar esa presencialidad», meta que no está reñida con el traslado parcial o íntegro de la enseñanza a la red «si hay un nuevo confinamiento».

Para que ese cambio responda rápidamente a las distintas situaciones que se puedan dar, Palomar apuntó que en el campus de la UA se ha realizado una inversión de dos millones de euros para equipar las 470 aulas del campus con tecnología que permita seguir las clases por internet. El dirigente de la UMH explicó que los campus de su centro cuentan también con videocámaras en las aulas para streaming y videoconferencia.

«No es un cambio metodológico, sino una adaptación del método», quiso matizar Palomar.

Recién elegidas entre las 13 universidades españolas que participan en el programa de alianzas entre campus europeos de la UE, para ambas instituciones la movilidad de alumnos e investigadores es un asunto prioritario pese a la pandemia. Palomar la consideró «vital» y señaló que «la prevención» es la manera de generar «un espacio común» de seguridad para los participantes en programas Erasmus o de investigación transnacional.

Más precavido pero igualmente favorable a los desplazamientos, Ruiz recordó en su turno que «la movilidad está muy relacionada con las condiciones cambiantes» y avanzó los resultados de un estudio de la UMH que sitúa la segunda oleada de casos a finales de agosto en lugar de a comienzos del otoño. Por ello, recordó que hay opiniones favorables a trasladar el movimiento de Erasmus «al segundo cuatrimestre».

No obstante, el rector de la UMH remachó, al igual que su homólogo, que no cree «en el Erasmus online» y que lo considera una vivencia para el alumno que debe ser presencial «con medidas estrictas». «Sin responsabilidad no habrá movilidad», recalcó Ruiz.

Investigación

El último bloque del encuentro abordó el desarrollo que va a tener la investigación en estos meses. El rector de la UA advirtió que «de aquí nos sacan la innovación y la investigación» y puso como claro ejemplo el prometedor tratamiento celular contra la covid-19 coliderado por el exministro y profesor de la UA Bernat Soria, en el que también participan científicos de la UMH. Dado el peso de la universidad pública en el esquema de I+D español, en el que estas instituciones soportan «el 80% de la investigación», según los datos aportados por el rector de la UA; es determinante garantizar «un protocolo que permita continuar con la investigación de forma segura». Especialmente aquella que, por precisar de laboratorios o instrumental específico, «no puede realizarse confinados».

En la misma línea, Ruiz celebró las sinergias en la investigación urgente del nuevo coronavirus, como la de Soria y otro estudio de ambas universidades y próxima publicación «que estudia la relación entre covid y meteorología». En investigación propia, destacó un proyecto de la UMH que busca soluciones a la pandemia a través de la inteligencia artificial. «Algunos tipos de investigación han sufrido, sobre todo la de laboratorios por las medidas de seguridad, pero si algo ha hecho esta crisis es resaltar la investigación», concluyó Ruiz.