El Castillo de San Fernando tardó menos de cuatro años en construirse, allá por 1809, en plena Guerra de la Independencia. Las obras de recuperación arquitectónica y accesibilidad del baluarte no van a tardar tanto, pero sí más de lo previsto. Los trabajos arrancaron en enero y se iban a alargar por espacio de cinco meses, hasta finales de junio.
Pero llegó el coronavirus el estado de alarma, el confinamiento, y los plazos saltaron por los aires. Ahora las obras se han retomado, pero ni de lejos se van a cumplir las fechas. Hasta finales de año no estarán acabadas, según confirman fuentes del Ayuntamiento.
Eso significa que, entre unas vicisitudes y otras, el Castillo de San Fernando va a permanecer un año cerrado, un año sin que ningún visitante pueda pasear entre su muros ni contemplar, desde lo alto, las vistas de la ciudad.
Las obras de la fortaleza tienen un presupuesto de 936.291 euros, se enmarcan dentro de la estrategia Edusi e incluyen el acceso al castillo desde la calle Ronda del Castillo, la rampa y acceso vertical por la Puerta de los Leones, las bóvedas, la terraza inferior, terraza superior y el Torreón circular.
El objetivo principal es consolidar y restaurar aquellas zonas que amenazan desprendimientos y garantizar la seguridad de los usuarios. Además, el Consistorio pretende rehabilitar las superficies dentro de un itinerario cultural gestionado por un centro de interpretación.
Igual «suerte» corre otro de los proyectos de la zona, la rehabilitación del skate park y su regeneración como espacio de dinamización ciudadana. Con un presupuesto de 368.432, euros y un plazo de ejecución de cuatro meses, las obras empezaron casi al mismo tiempo y les ha pasado lo mismo: hasta final de año no estarán terminadas.
El proyecto contempla una renovación total del skate park con una nueva pista que incorpora nuevos obstáculos y rampas, mediante una nueva piel de hormigón, que permita realizar eventos deportivos y cumpla las exigencias en campeonatos, proyectando nuevos obstáculos y rampas en dos niveles.
Otras obras que no estarán finalizadas en el plazo previsto son las de reforestación de la ladera este del Monte Tossal, en la subida hacia el colegio público La Aneja y el Conservatorio de Música y Danza, entre las calles Escultor Bañuls y la Ronda del Castillo.
La actuación, con una inversión de 943.577 euros y un plazo de ejecución de ocho meses, apuesta recuperar este entorno medioambiental privilegiado del centro de la ciudad de Alicante.
Monte Tossal
Pero, según las mismas fuentes municipales, la plantación de especies arbustivas y arbolado mediterráneo se ha «aplazado» hasta los meses de octubre y noviembre, de modo que en diciembre se prevé que se ponga fin a las obras.
Todo esto siempre y cuando la situación sanitaria no se agrave y no se tenga que volver al confinamiento.
