Sin apuros, pero sin el respaldo de la oposición. Así ha sacado adelante el bipartito de Alicante las dos primeras modificaciones de crédito para financiar ayudas por 7,7 millones de euros para aliviar la crisis social y económica derivada del coronavirus. En un nuevo pleno por vía telemática, el gobierno municipal sólo ha contado con el respaldo de Vox para el paquete de ayudas sociales (2,7 millones), financiadas a través del remanente de tesorería (ahorros municipales), frente a la abstención del PSOE y Compromís y el voto en contra de Unidas Podemos. Por su parte, el ejecutivo de Barcala se ha quedado sólo en el paquete de ayudas para autónomos y pymes (5 millones de euros), que ha contado con la abstención en bloque de la oposición, salvo el "no" de Unidas Podemos.

Al alcalde de Alicante, Luis Barcala (PP), no le ha gustado no sumar el apoyo de la oposición en los primeros cambios en el Presupuesto municipal. Y así lo ha expresado en la última intervención del pleno extraordinario de hoy. "Luego se habla de falta de diálogo, pero Alicante necesitaba unas ayudas, y ahora se está haciendo la regularización contable para esas ayudas. Hacer política está fuera de lugar. Pero es más triste aún buscarse una excusa para oponerse o para no respaldarlo. Tiempo habrá, cuando haya que modificar el Presupuesto de verdad, para hablar de negociaciones", ha señalado Barcala en un evidente discurso crítico con la oposición, quien además ha defendido su, a su juicio, constante diálogo con la oposición: "Este pleno es para la aprobación de dos modificaciones de crédito, necesarias para abordar el plan de ayuda social y económico. Lo digo por los que vean el pleno, era para eso, para el plan de ayudas, que fue comentado en sucesivas juntas de portavoces. Ni las medidas ni sus consecuencias nunca habían sido tan habladas en el Ayuntamiento de Alicante. Y por esa cuestión me siento muy satisfecho y agradecido por las aportaciones recibidas", ha añadido Barcala.

Desde la oposición, el concejal socialista Miguel Millana ha criticado los presupuestos y la actitud, socio de gobierno de Barcala en Alicante. "Tenemos unos presupuestos que no responden a la emergencia social y económica. El gobierno presenta dos modificaciones de crédito, que llegan tarde igual que el presupuesto. Otros ayuntamientos de la provincia han mostrado más celeridad para la emergencia social y económica. Alicante, con este alcalde, siempre llega tarde", ha defendido Millana, quien ha tendido la mano a Ciudadanos, en alusión a los acuerdos entre el PSOE y la formación naranja a nivel nacional que podrían repetirse en otros puntos de la geografía nacional: "Están abducidos y anulados por Barcala. ¿Van a seguir apoyándole? ¿Desean apoyar a un PP cegado con su afán imposible de hacer caer al gobierno de España?". Los socialistas se han abstenidos en ambas votaciones.

Por su parte, desde Unidas Podemos, Xavier López ha reprochado al bipartito no haber conocido el origen del dinero para la modificación de crédito hasta la reciente Comisión de Hacienda, en una crítica por la falta de negociación del bipartito. "La oposición no ha conocido el origen de las partidas hasta la Comisión de Hacienda. No contará con nuestro voto hasta que convoque la Oficina de Emergencia Social de forma quincenal. Los Servicios Sociales están muy mal gestionados en los últimos doce meses, desde que esta al frente la señora Julia Llopis", ha añadido López. Unidas Podemos ha votado en contra en ambos puntos.

Desde Compromís, Natxo Bellido ha insistido en los retrasos que acumula el bipartito, y que a su juicio lastran la gestión municipal. "La crisis ha requerido de agilidad y eso es complicado para un gobierno que aprueba el presupuesto a mitad de año, que deja pasar el tiempo sin arreglar la problemática de la estación de autobuses... Estamos en julio y aún no se han pagado las ayudas a los autónomos. Tampoco destaca el gobierno por su capacidad de trabajo", ha apuntado Bellido, crítico con la gestión de los Servicios Sociales y también con la falta de diálogo del gobierno de Barcala: "No bloquearemos la aprobación, pero nos gustaría haber sido consultados ante los recortes. Poder consensuarlos, por ejemplo en Juventud e Igualdad. Hasta ahí no ha llegado la capacidad de dialogo del señor Barcala". Compromís se ha abstenido en ambas votaciones.

Por último, el portavoz de Vox, Mario Ortolá, ha reprochado al ejecutivo municipal falta de ambición a la hora de ajustar el presupuesto, ya que la formación ultraderechista defiende que hay partidas que siguen siendo prescindibles, como subvenciones a entidades vecinales o a la participación, para la adquisición de material informático, para elaborar el Plan de Igualdad o para el área LGTBI. "No podemos apoyar la segunda modificación, podría haberse dado un paso más y haber extraído más dinero de muchas partidas que no son urgentes. Incluso dudo si algunas son necesarias", ha señalado Ortolá, quien ha criticado al Gobierno central por "asfixiar" a los ayuntamientos al limitar el gasto de los ahorros municipales para hacer frente a las consecuencias derivadas del covid-19: "Lo que no estaba previsto son los bandazos y la falta de decisión del Gobierno central, que tiene como objetivo asfixiar a los ayuntamientos. A nivel nacional ofrecen medidas populistas y eso hay que pagarlo y lo han encontrado en la financiación municipal".

Aprobado el primer paquete de medidas socioeconómicas, el bipartito ya preparada una tercera modificación de créditos para seguir financiando ayudas, que prevé someter al pleno en las próximas semanas. También tiene previsto una cuarta modificación, que ya se prevé negociar con la oposición al tratarse de cambios sustanciales en el Presupuesto, al no proceder de ahorros producidos por la falta de actividad durante el estado de alarma.

Para la financiación de la segunda modificación de créditos (la primera se financia con ahorros), el bipartito ha decidido retirar dos millones de euros de gasto de personal, 1,2 millones de gasto en bienes corrientes, unos 700.000 euros en transferencias corrientes y algo más de un millón de euros en inversiones reales. En total cinco millones de euros que irán para las ayudas a pequeños empresarios. Ese dinero estaba inicialmente destinado a partidas como mantenimiento de jardines (667.000 euros), celebración de fiestas (155.000 euros), promoción de la igualdad (70.000 euros), actividades culturales y juveniles (39.000 euros), plan de juventud (10.000 euros), atenciones protocolarias (12.300 euros), subvenciones para consumo (35.000 euros), movilidad (30.000 euros), para el Consejo de la Juventud (8.000 euros) y a proyectos juveniles (20.000 euros), junto a las ayudas para la escolarización de 0 a 3 años (200.000 euros), entre otras. Respecto al apartado de inversiones reales, el bipartito ha pasado la tijera en proyectos como la rehabilitación de la fuente de Luceros (que ha pasado de 100.000 a 75.000 euros), una obra que todavía no se ha convocado como figura en el expediente de Hacienda. También ha reducido 220.000 euros la partida para la ampliación del cementerio, alegando que es una obra plurianual, o eliminado el presupuesto para infraestructuras del transporte público (80.000 euros) y una partida relativa a la mejora de accesibilidad de centros escolares (39.000 euros), entre otras. En total, un millón menos en inversiones reales del total de 15 millones presupuestados.