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CORONAVIRUS

Comer y dormir en el cole

Solo escuelas infantiles con amplios espacios en el exterior se han decidido a abrir este verano

Niños ayer en el primer día de la escuela infantil de verano Picapiedra en las instalaciones al aire libre. HÉCTOR FUENTES

La conciliación laboral y familiar reclamada por los padres, ha llevado finalmente a algunas escuelas infantiles, las menos según datos aportados por la asociación provincial de los centros para niños de 0 a 3 años homologados por la Generalitat, a abrir sus puertas este verano concentrando todas las actividades al aire libre para extremar las medidas de seguridad frente al coronavirus.

Así lo explican a este diario centros como Hormiguitas, Picapiedra o La Mar Salada, todos ellos ubicados en la zona de playas de Alicante donde la demanda de padres que trabajan en la hostelería es más acuciante a la hora de compaginar trabajo y familia.

«Resulta muy complicado este año pero te ves en la obligación para dar servicio a los padres», apuntan desde la Escuela Infantil Picapiedra. Las exigentes ratios establecidas frente al virus dejan el aforo de niños a la mitad aunque las aulas finalmente apenas se destinarán a «comer y domir la siesta», añaden en el centro, porque el resto de actividades se van a concentrar todas al aire libre.

Esta ha sido una de las causas que ha limitado al mínimo la apertura de escuelas infantiles este verano, ya que prácticamente solo las que disponen de extensiones significativas y espacios al aire libre se han decidido a abrir sus puertas.

En Picapiedra disponemos de cuatro patios diferenciados. La piscina no la abrimos por el coste que supone ya que no podemos matricular tampoco suficiente número de niños para sufragar tanto su apertura como al monitor, pero a los niños no les van a faltar actividades y tampoco el agua». Así, tanto juegos de agua como en la naturaleza, actividades que se van a fomentar como la jardinería con la práctica de plantación en el huerto, se llevarán la palma este verano junto al deporte en general «para que puedan correr todo lo que no han podido hacer durante este tiempo», concluyen.

Desinfección

La directora de Hormiguitas, Irene Vilanova, explica a su vez que además de grupos de niños más reducidos, de forma que entre los más mayores de 2 a 3 años solo se reunirán 10 en lugar de 20, también se mantendrán unidades estables para evitar que contacten los grupos entre sí.

El centro ha parcelado el patio para esto y además, cuando unos u otros cambien de actividad, todas ellas al aire libre, se procederá a la desinfección de materiales, juguetes, palas, motos y un largo etcétera. El baile y la pintura también se contemplan entre las dedicaciones destinadas este verano para los más pequeños en ese centro que a su vez ha habilitado dos accesos distintos «para evitar aglomeraciones en la entrada y salida».

La responsable del centro añade que no faltan «alfombrillas desinfectantes y gel por todas partes», amén de que tanto padres como profesores están obligados a llevar mascarillas. «Enviamos con antelación todas las medidas y protocolos vigentes a los padres porque deben consentir en el procedimiento a seguir si se detectara algún síntoma de covid y no traer a los niños de antemano».

Pese a todos los inconvenientes que derivan de la pandemia, desde Hormiguitas aseguran que afrontan el verano «con ilusión y ganas, convencidos de que todo va a ir genial».

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