Hasta un 60% de clientes menos en los centros comerciales de la provincia el primer domingo de apertura porque la pandemia sigue condicionando la libre circulación. Aunque en algunas grandes superficies el descenso no ha sido tan acusado, donde más se nota la escasa animación es en las ciudades costeras. El porcentaje de visitas suele ir aparejado al de ventas, por lo que no es un dato muy halagüeño.
La Asociación de Grandes Empresas de Distribución (Anged), que representa a los centros comerciales, apunta a la ausencia de turismo como factor condicionante de estos datos, de ahí que el sector confíe en la apertura de fronteras para recuperar el público internacional y en la llegada del turismo interior con la recuperación de la movilidad dentro de España.
La provincia cuenta con 24 centros comerciales, que ocupan una superficie bruta alquilable de 680.507 metros cuadrados, según datos de la Asociación Española de Centros Comerciales. El pasado domingo, con el paso a la nueva normalidad y la reactivación de las aperturas en festivo en zonas que el Consell tiene catalogadas como de gran afluencia turística, pudieron reabrir las grandes superficies de Alicante, Finestrat, Torrevieja, L'Alfàs del Pi, Benissa, Orihuela costa y Pilar de la Horadada costa, donde el comercio tiene libertad horaria para abrir los domingos y festivos desde el pasado domingo hasta el primer domingo de las rebajas de enero. «Siempre cuesta cada año el primer domingo de apertura porque el público en general lo desconoce. Además, la epidemia sigue condicionando la libre circulación y nos hace falta el turista, y la gente de la provincia, que han sido, hasta el momento, los visitantes más importantes de los festivos», señaló ayer el director de El Corte Inglés de Alicante, Juan Cabello.
Mañana, nueva apertura
En el caso de la capital, donde el gran comercio volvió a abrir ayer, festivo local, también está influyendo en las cifras el que no se celebren las Hogueras. Al no haber mascletaes, por ejemplo, que congregan a miles de personas, se desvanece ese público potencial. Mañana, día de Sant Joan y festivo autonómico, el comercio volverá a abrir en los municipios autorizados de la provincia, excepto en Alicante capital por acuerdo de los agentes sociales y económicos al ser el día grande de las fiestas, aunque este año se suspendieron por la pandemia.
Las grandes superficies ya avanzaron que este periodo de apertura comercial, tan esperado por estos establecimientos, llegaba en medio de un panorama de máxima incertidumbre por el escenario inédito derivado de la crisis sanitaria por el coronavirus. Estas aperturas están ligadas tradicionalmente al turismo y a los visitantes de la provincia, sobre todo del Alcoià y del Medio Vinalopó.
Según dijo el director de El Corte Inglés, la facturación está aguantando pese al descenso del volumen de clientes porque las familias no acuden a pasear a los centros comerciales sino por una necesidad de compra.
La Asociación Nacional de Grandes Empresas de Distribución (Anged) también alude al factor turismo como causa de la caída en la afluencia el primer domingo de apertura. Su portavoz, Joaquín Cerveró, destaca el impacto en zonas costeras, receptoras de visitantes, y considera que la recuperación va a costar, sobre todo en las primeras aperturas, hasta que empiece a normalizarse la llegada de ciudadanos a través de las fronteras y el mercado interior. «Lo que esperamos de las aperturas dominicales es que los clientes se vayan percatando de que ya estamos abiertos, y que a medida que el turismo empiece a moverse, tanto el nacional como el internacional, vuelvan a coger la fuerza que tenían. En los meses de verano se convierten en el segundo día de mayor venta en aquellas ciudades eminentemente turísticas».
En este sentido, la vicealcaldesa de Alicante y edil de Turismo, Mari Carmen Sánchez, dijo ayer que las reservas se están animando y que las previsiones para el verano no son tan negativas como las que inicialmente se esperaban. «Se van reactivando los mercados nacional e internacional, que en este caso representa el 65% del total de visitantes que recibimos», afirmó.
Restaurantes que trabajan a un tercio de lo habitual
Los establecimientos de restauración de la provincia ya tienen reservas de clientes de Madrid para la próxima semana y aún muy poco turismo internacional ya que acaban de reabrirse las fronteras. Sin embargo, la afluencia a las playas del cliente local anima también el sector, que empieza a mejorar en su actividad, sobre todo en la última semana y especialmente en el litoral. Sin embargo, las barras de muchos negocios están vacías, señal de que todavía no existe una gran demanda, señalan desde la Asociación Provincial de Hostelería. En establecimientos a pie de costa como Casa Julio, en la playa de San Juan de Alicante, incrementan las reservas de Madrid para julio y los esperan «como agua de mayo». En la playa del Postiguet de Alicante los negocios trabajan al 30% de lo que era habitual, con la mitas de empleados de ERTE y preocupados por las obras que se realizan para eliminar un vertido de fuel.
