«Me he apuntado a la academia para repasar matemáticas y física porque este año ha sido un poco raro, estamos todos preocupados por como serán los exámenes de la PAU -Pruebas de Acceso a la Universidad- aunque den más opciones. Nosotros hemos dado todo el temario, pero el último trimestre más por encima, así que si caen integrales en el examen de Matemáticas escogeré otra cosa porque no me siento segura». Patricia Tomás es una de las miles de alumnas que este año se enfrenta a la Selectividad más atípica que se recuerda y como otros muchos estudiantes de segundo de Bachillerato ha recurrido al repaso en academia para tratar de entrar al grado que quiere, en su caso, Magisterio.
Patricia recibe las clases online en la Academia Serfa, donde aún no se ha retomado la actividad presencial. «Vamos a esperar a septiembre porque estos meses la matrícula online se ha disparado un 200% y en nuestro caso funcionamos bien con esta modalidad y contenidos extra en vídeos que los alumnos pueden ver cuando quieran y vemos que les va bien», explica Sergio Fabra.
Esa es la tónica general en estos centros de enseñanza que también se han tenido que reinventar con el covid-19. Algunas ya han levantado la persiana física, pero los alumnos han caído un 40% con respecto al año pasado, mientras las matrículas online suben tras un trimestre en el que parece que los estudiantes se han acostumbrado a recibir así los contenidos, aunque los consultados coinciden en que prefieren el contacto directo con el profesor.
Ramón Díaz, de la academia Co2, explica que «hemos tenido que adaptar los espacios y proporcionar gel hidroalcohólico y mascarillas. Antes en un aula estaban ocho o diez alumnos y ahora cuatro», además «hemos notado el parón de estos meses aunque es verdad que están aumentando las llamadas de alumnos de segundo de Bachillerato que quieren apuntarse la semana que viene», añade.
Los exámenes se celebrarán los próximos 7, 8 y 9 de julio en los institutos y centros de Bachillerato concertados, pero en el caso de Co2 advierten de que «no hacemos milagros». Es más, a los que lleguen se les realizará una prueba de nivel para asegurarse de que con un empujón aprobarán y si no no los admitirán.
En otra academia, Aga, apuntan a que se nota que este año «alumnos y padres están más preocupados con las pruebas. En algunos centros no han impartido toda la materia y es verdad que no en todos se ha impartido con la misma calidad por las plataformas que han utilizado para las clases online y la metodología de trabajo. Se nota diferencia entre los privados y concertados, que han ido mejor, y los públicos».
Otra alumna consultada, Noelia López, también recibe clases online de Matemáticas y Química, asignaturas que le bajaron la media y la dejaron fuera de Psicología. «Llevo todo el año preparándome para el examen, así que estoy deseando que llegue el día y hacerlo bien, Matemáticas el año pasado fue horrible, pero afortunadamente este año se podrá elegir entre más opciones», indica. Cree que este año subirá la media de las calificaciones con respecto al año pasado aunque no se confía.
