Información

Información

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Carrera contrarreloj en la lucha contra el covid-19

Los anestesiólogos del Hospital General de Alicante han adaptado equipos y creado nuevas zonas de ingreso en tiempo récord para atender a los pacientes más graves

32

Servicio de Anestesiología del Hospital General de Alicante

Tuvieron que instalar camas para enfermos críticos donde no las había, adaptar respiradores para que ningún enfermo se quedara sin este soporte vital, en definitiva, trabajar contrarreloj para hacer frente a la pandemia de coronavirus.

El servicio de Anestesiología del Hospital General de Alicante ha asumido durante toda esta crisis sanitaria el cuidado de los pacientes más graves, tanto de afectados por covid-19 como de otras enfermedades, una tarea compartida con el servicio de Medicina Intensiva del centro sanitario.

A partir de mediados del mes de marzo, el ingreso de pacientes comenzó a crecer como la espuma, también de aquellos que estaban en una situación crítica. Estos ingresos se prolongaban días y días, por lo que el Hospital General tuvo que buscar nuevos espacios para dar cabida al elevado número de pacientes que llegaban y que requerían de los cuidados más avanzados. Para eso recurrieron a los anestesiólogos, acostumbrados a cuidar de pacientes en situación crítica tras una operación.

El reto no fue sencillo, ya que se trataba de buscar nuevos espacios para atender al creciente número de enfermos. «Me llamaron un viernes por la tarde y me dijeron que en 24 horas teníamos que montar un área para atender a pacientes covid en la zona de despertar de los quirófanos infantiles. Partíamos de cero y había que traerlo todo: camas, respiradores, material, personal...», recuerda Rosario Perales, supervisora de la Unidad de Críticos Covid. En esta zona del hospital se han habilitado 6 camas para pacientes críticos y los mismos quirófanos se han utilizado para aislar a enfermos de covid-19 recién extubados, ya que en los quirófanos se renueva el aire 30 veces a la hora, por lo que el riesgo de contagio era menor.

Ahora que la infección por covid-19 ha bajado, esta zona del hospital está siendo utilizada para la recuperación de pacientes que han sido sometidos a una cirugía, pero en cualquier momento se puede recuperar para atender a enfermos de coronavirus ante un posible rebrote de la enfermedad. A los zonas específicas de reanimación, en las próximas semanas se van a sumar otras 15 camas para el ingreso de pacientes críticos en la segunda planta del Hospital General. Camas que serán gestionadas por el servicio de Anestesiología y que también permitirán hacer frente a una posible nueva oleada de covid-19.

Desde que estalló la pandemia, el servicio de Anestesiología del Hospital General ha atendido en esta zona de nueva creación a 15 enfermos graves por coronavirus «y tenemos el orgullo de que ninguno de ellos ha fallecido», sostiene Luis Gómez, responsable de este servicio. Al margen de estos enfermos, han tenido que atender a 50 pacientes en situación crítica por otras patologías debido a la sobrecarga en otros servicios del hospital. Además de instalar camas donde no las había, otro de los retos ha sido el de adaptar los respiradores del servicio para pacientes que necesitaban de este soporte durante días, incluso semanas, algo para lo que no estaban preparadas estas máquinas, que dan soporte a los enfermos durante una operación. «Llegamos a adaptar 13 máquinas, pero podíamos haber transformado 25 si hubiera sido necesario», afirma Luis Gómez. Ante un posible repunte del virus el Hospital General de Alicante ha pedido 12 respiradores más.

Aunque el papel de los anestesiólogos del Hospital General de Alicante no se ha limitado a camas y respiradores, como recuerda Carlos Muñoz, facultativo especialista del servicio. «Hemos llevado a cabo labores formativas a todo el personal del hospital para enseñarles cómo ponerse y quitarse los equipos de protección, ya que muchos de los contagios se producen al desvestirse y además, cada hospital tiene sus propios equipos de protección, por lo que hay que adaptar los protocolos a estos modelos», recuerda Muñoz, quien ha llevado a cabo esta labor formativa junto a José Navarro y Esteban Salas, anestesiólogos en el centro sanitario.

Pero el virus ha golpeado doblemente a este servicio, ya que 18 de sus cerca de 65 integrantes se contagiaron. «Fue al inicio de la pandemia cuando todavía no pensábamos que el virus estaba circulando por nuestro entorno», señala Luis Gómez. Hasta 11 trabajadores llegaron a estar de baja de manera simultánea. «Estos meses de trabajo han sido un orgullo. La gente ha estado mañana, tarde y noche trabajando. Incluso los que estábamos enfermos, desde casa, tratábamos de ayudar», sostiene Gómez.

El jefe de Anestesiología del Hospital General recuerda que esta pandemia agota los recursos sanitarios. «La mortalidad por covid-19 es del 2%. Si se contagiara toda la población hablaríamos de 900.000 fallecidos. La última vez que en España hubo tantos muertos fue en la guerra civil, por eso son tan importantes las medidas de confinamiento». Además, recuerda Luis Gómez, entre un 10% y un 20% de quienes ingresan por covid en los hospitales van a requerir de cuidados intensivos durante varias semanas.

Compartir el artículo

stats