El anuncio que realizó el Gobierno la semana pasada de poner en marcha medidas de alivio en la desescalada para los municipios con menos de 10.000 habitantes despertó una euforia que en gran parte de estas localidades se ha vuelto decepción. La Orden Ministerial que al fin se publicó el viernes en el Boletín Oficial del Estado (BOE) restringe a los municipios con una densidad de población inferior a 100 habitantes por kilómetro cuadrado aspectos como la posibilidad de salir a pasear sin horarios, y que los menores vayan acompañados de más de un adulto, y de que bares y restaurantes puedan abrir el interior de sus locales con condiciones.
La escasa superficie de la mayoría de los términos municipales hace que 41 de las 104 localidades de la provincia con menos de 10.000 habitantes se hayan quedado fuera de esas medidas de alivio por tener una densidad de población superior a los 100 habitantes por kilómetro cuadrado. En todas ellas la desescalada continuará como hasta ahora, es decir, en fase 1 pero sin ninguna medida excepcional en las que sobrepasan los 5.000 vecinos, y con la libertad horaria para salir a pasear como única condición para estos últimos. Bares y restaurantes tendrán que esperar a la fase 2 para atender clientes en el interior.
Así pues, de las 253.916 personas que parecía que iban a beneficiarse en la provincia de estas medidas, a la hora de la verdad serán únicamente 64.341 las que lo hagan. A las 189.575 restantes se puede decir que se les puso un caramelo en la boca y que se lo han quitado antes de que hayan llegado a saborearlo. Además, la confusión en torno al tema ha sido notable estos dos últimos días, ya que la densidad de población no es un dato que conozcan muchas personas aunque todo el mundo pueda consultarlo a través de fuentes oficiales como el Portal Estadístico de la Generalitat.
A esto se añade que ninguna instancia oficial en la Comunidad ha especificado en un listado cuáles son esos municipios que se benefician de las medidas de alivio. Tan solo el Instituto Cartográfico Valenciano difundió el viernes a través de Twitter un mapa en el que señalaba los municipios de la autonomía con menos de 10.000 vecinos y una densidad menor a 100 habitantes por kilómetro cuadrado, pero solo marcando los términos municipales, sin indicar los nombres, por lo que había que tratar de adivinar cuál era cada población. La Delegación del Gobierno y la Conselleria de Sanidad compartieron este mapa en la misma red social, pero sin añadirle ningún dato explicativo.
Los dos únicos términos municipales alicantinos con más de 5.000 habitantes coloreados en ese mapa eran los de Xixona y Pinoso, que al contrario que el resto de los de su franja no llegan a los 100 habitantes por kilómetro cuadrado gracias a su extensa superficie, la quinta y octava mayor de la provincia, respectivamente. Estas localidades, junto con otras 61 de menos de 5.000 habitantes, se encuentran en una posición más avanzada. En una situación intermedia quedan otros 23 municipios con menos de 5.000 personas en donde sí se puede pasear o hacer deporte a cualquier hora pero el interior de los bares sigue cerrado, mientras que los 57 restantes no tienen medidas de alivio.
Entre estos hay 18 localidades de entre 5.000 y 10.000 habitantes donde las expectativas han quedado frustradas, como Sax, Muro, Catral y Monforte del Cid. Pero entre los que se quedan a medias hay también municipios cuya elevada densidad no es sinónimo de masificación, sino de un término municipal minúsculo. Así están, entre otros, l'Alqueria d'Asnar, el de menor superficie de la provincia, y Rafal, el de mayor densidad.
