Alicante ha reabierto los mercadillos de la ciudad, únicamente los puestos de alimentación en esta fase cero de la desescalada, con control de acceso para poder acceder y también de aforo. La clientela, desde primera hora, ha formado una fila en el exterior, sobre todo en el recinto de Teulada, el de mayor afluencia, y va accediendo conforme los puestos se vacían de anteriores compradores bajo la supervisión de la Policía Local ya que se ha establecido un control de aforo. En algunos de ellos incluso solo compra una persona y en otros de mayor tamaño o que suelen atraer a mucha clientela varias a la vez pero sin aglomerarse bajo la supervisión policial y manteniendo espacio entre sí.
Tras la primera experiencia de hoy, el Ayuntamiento reforzará para el sábado, próximo día de apertura, la seguridad en el mercadillo de Teulada dado que es el que más puestos tiene, un total de 117, y el que más público recibe y se estudia también habilitar un nuevo punto de acceso con presencia policial para evitar esperas. En este recinto, el mayor de Alicante, el acceso se realiza por la Gran Vía y el público sale por la calle Campo de Mirra. Además, la próxima semana se reanuda la prestación del servicio en las líneas 16 y 17 de bus que conectan con este mercadillo.
En Alicante, los otros mercadillos son Benalúa, Carolinas y Babel. se ha previsto que en Benalúa se instalen los jueves y sábados 21 puestos, frente a los diez de Carolinas, lo que supone la mitad de los vendedores habituales de productos de alimentación en ambas zonas. Por su parte, en Babel serán 33 puestos los autorizados. En los accesos a los cuatro mercadillos se colocarán dispensadores de hidrogel de «uso obligatorio» y estará «prohibido tocar los productos por los clientes, que exclusivamente podrán ser manipulados por los vendedores». Las personas deberán estar separadas por dos metros. Los 117 puestos del mercadillo de Teulada ocupan el espacio que antes ocupaban todos los placeros.
Además, voluntarios de Cruz Roja están colaborando, dando preferencia a las personas mayores para que no tengan que guardar la cola. La mayoría de clientes y todos los placeros llevan mascarillas, que también se reparten en el acceso a los distintos recintos para que todo el público la llve. Los puestos guardan entre sí gran espacio para mantener la distancia social.
La concejala de Comercio, Lidia López, ha hablado de normalidad y reapertura positiva desde primera hora, bajo el consejo de la Policía Local controlando los accesos "y todos con mascarllas. Se respeta la distancia de seguridad entre puestos". La edil aconseja para el sábado llevar hecha la lista de la compra para que los usuarios estén menos tiempo en los recintos y se eviten las aglomeraciones en los mercados.
