El presidente de la Generalitat Valenciana finalizó ayer su intervención en el «Foro Alicante» anunciando que el Consejo de Ministros ha declarado la salida de la vuelta al mundo a vela desde el Puerto de Alicante de 2021 como «acontecimiento de excepcional interés público», lo que permitirá que las empresas colaboradoras de la Ocean Race tengan exenciones fiscales. Puig quiso despedirse de los asistentes con «una buena noticia» para la Comunidad y aseguró que esta decisión da respuesta a la petición que había planteado el Gobierno valenciano. Efectivamente, a los pocos minutos, el Gobierno confirmó los datos que había aportado el jefe del Consell.

El evento está previsto que se celebre en octubre de 2021, en lo que se espera sea plena fase de recuperación, y Puig recordó que que la última edición de «Alicante, puerto de salida» supuso un impacto económico cercano a los 70 millones de euros en el PIB de la Comunidad y generó más de 1.000 empleos en doce meses, además de la proyección mediática y promocional para Alicante. La declaración de excepcional interés público se había hecho hasta ahora en la Ley de Presupuestos o en la Ley de Acompañamiento y tenía validez para tres años. Pero las prórrogas de los Presupuestos Generales del Estado de los últimos ejercicios obligaba a llevar esta declaración a otra figura normativa. Puig subrayó que esta declaración abre la puerta a que se puedan beneficiar de exenciones fiscales las empresas que colaboren en la Ocean Race, bajo las condiciones que establece el manual de marca que aprueba el consorcio que regula la operativa fiscal del evento. La declaración de extraordinario interés público permite a las empresas colaboradoras durante tres años, el anterior y el posterior a la regata y el año mismo de la celebración, acogerse a esas exenciones.

Además de este anuncio, el presidente se refirió a diversos temas de actualidad y respondió a las preguntas de los asistentes, entre los que se encontraban consellers, el presidente de la Diputación de alicante, Carlos Mazón, alcaldes, concejales y representantes de los sectores productivos de la Comunidad. En total, se registraron un total de 865 inscripciones y fue el director del Club INFORMACIÓN, Toni Cabot, el encargado de moderar el acto y formalizar las preguntas al presidente. En cuanto a la gestión del superávit,el jefe del Consell dijo que tanto ayuntamientos como autonomías y el Gobierno tienen que ponerse de acuerdo en las grandes prioridades: «No se trata de hacer la guerra cada uno por su cuenta, hay que diagnosticar la situación y tenemos que coordinarnos más y trabajar más para objetivos comunes». En su opinión, «los ayuntamientos tienen un papel fundamental para esta salida hacia la normalidad».

Preguntado sobre si se podrá salvar de alguna manera la campaña de verano, Puig explicó que va a ser una temporada «extraodinariamente difícil». Pero desde el Consell no están «dispuestos a renunciar a nada» y se trabaja con el sector y el conjunto de las administraciones para ver cómo garantizar la seguridad en una parte fundamental como es la oferta de sol y playa. Respecto a si es momento para la diversificación de esa oferta, señaló que se lleva trabajando desde hace tiempo en esa línea para generar nuevos productos, pero advirtió que «no se debe contraponer el sol y playa a otros modelos, se trata de ir sumando» y hacerlo «sin menospreciar ningún modelo» y sin precarización. En el aspecto educativo, también dijo que se trata de un sector esencial y que durante el estado de alarma los esfuerzos se han centrado en paliar las urgencias y limitar el impacto negativo de esta crisis provocaba a los niños. El dirigente valenciano mostró su satisfacción por el desbloqueo de las licitaciones de obra pública sin necesidad de motivar por parte del Gobierno, al afirmar que es «un factor de reactivación en momentos complicados».

Apuesta por multiplicar los tests masivos y por reforzar el sistema sanitario público

El presidente avala el modelo de los hospitales de campaña para mantener la alerta frente al coronavirus

Ximo Puig hizo ayer referencia a la construcción de los hospitales de campaña y explicó por qué no se optó por un modelo similar al hospital de Ifema en Madrid, Puig reiteró que su apuesta fue ampliar hospitales de referencia antes que impulsar otros más lejanos e indicó que en Alicante, por ejemplo, hubo un momento en que las previsiones de impacto de la Covid-19 eran mucho mayores que las que se han dado finalmente. En todo caso, reiteró que la pandemia sigue presente y estos hospitales van a servir y «han venido para quedarse durante bastante tiempo y se le sacará el mejor rendimiento».

Respecto a la realización de tests masivos, incidió en que hay que tener claro que «no son una vacuna» y el único que tiene demostrada mayor fiabilidad es la PCR, que se van a «multiplicar», utilizando todos los instrumentos al alcance y colaborando con el ámbito universitario y también privado. Preguntado sobre si en las circunstancias actuales es buen momento para la reversión de hospitales que quedan aún bajo gestión privada señaló que la vocación del Consell sigue siendo que la gestión sanitaria debe ser pública. «Además, debemos avanzar en la descentralización y los hospitales de campaña se han planteado en las tres provincias. Esa mirada descentralizada debe cimentar la accion de gobierno», aseveró.