Alicante reabrirá este jueves sus mercadillos de Teulada, Carolinas, Babel y Benalúa. Eso sí, lo hace bajo estrictas medidas de seguridad por la pandemia de coronavirus. La Policía Local de Alicante controlará los accesos y tendrá a quince agentes para hacer cumplir el plan de seguridad establecido para su apertura y puesta en marcha en la fase de la desescalada. Además, se colocarán carteles informativos con instrucciones de obligado cumplimiento.

El Diario Oficial de la Generalitat publicó hace casi dos semanas la resolución que regula la reapertura de los mercadillos de venta no sendentaria en toda la Comunidad Valenciana, exclusivamente para los productos alimentarios, desde el pasado 30 de abril. Así, Alicante se suma ahora a otros ayuntamientos que ya autorizaron la pasada semana la vuelta de los mercadillos a las calles mes y medios después.

En Alicante, se ha previsto que en Benalúa se instalen los jueves y sábados 21 puestos, frente a los diez de Carolinas, lo que supone la mitad de los vendedores habituales de productos de alimentación en ambas zonas. Por su parte, en Babel serán un total de 33 puesto los autorizados y en Teulada habrá un total de 117 vendedores, según ha explicado el Ayuntamiento de Alicante. La Policía Local comprobará que los puestos de venta están separados por una vía de tránsito, y con una distancia mínima entre ellos de seis metros, permitiendo una separación mínima de 2,5 metros entre los laterales.

En los accesos a los cuatro mercadillos se colocarán dispensadores de hidrogel de "uso obligatorio" y estará "prohibido tocar los productos por los clientes, que exclusivamente podrán ser manipulados por los vendedores". Las personas en espera deberán guardar una distancia de dos metros entre sí. Además los agentes recuerdan que todas las personas que presente síntomas compatibles con el Covid-19 deberán guardar cuarentena en sus casas.

El plan establece que los vendedores tienen que respetar entre ellos una distancia mínima de dos metros, y en caso de que las medidas del puesto no lo hagan posible, queda restringida la actividad a un solo vendedor. Los vendedores además tendrán que hacer uso siempre de guantes de protección y mascarilla, siguiendo las instrucciones y recomendaciones de higiene frente al coronavirus, y debe respetarse la distancia de dos metros entre el puesto de venta y la clientela, y dicha distancia va a estar convenientemente señalizada.

Por su parte está establecido que cada puesto cuente con dispositivos para residuos, de acceso con pedal, y con bolsa que permitan su cierre estanco. Los puestos deben ser desinfectados y limpiados con frecuencia, teniendo en cuenta las superficies tocadas, y siguiendo las instrucciones de limpieza y desinfección dictadas para hacer frente a la pandemia Covid-19.

Reacciones políticas

El edil de Seguridad, José Ramón González, ha señalado que "es necesario cumplir estrictamente las medidas de seguridad, la policía va a controlar los accesos y se deberán utilizar las entradas y salidas establecidas, respetar los turnos y distancias, es recomendable el uso de las mascarillas y abandonar el recinto al finalizar la compra".

Por su parte, la concejala de Comercio, Lidia López, ha destacado "la importancia de la apertura de los mercadillos para retomar su actividad bajo estrictas medidas de seguridad", y pide que "se cumplan todas las medidas preventivas sanitarias y de distancias tanto a los clientes como a los vendedores para garantizar que podamos volver a la normalidad lo antes posible".