Cada vez está más cerca la desescalada y las reuniones se suceden en busca de la forma idónea para llevarla a cabo. Además, la mejoría en las cifras obliga a pensar en un alivio de las condiciones. En ese sentido, Ximo Puig pide que se autorice lo antes posible la salida de las personas para realizar actividad física y que comience a tratarse la salida de los mayores. «Es necesario que las personas puedan de una manera segura tener una cierta actividad porque el confinamiento en sí mismo también tiene efectos negativos en la salud», señaló el presidente del Consell tras la reunión que mantuvo ayer de forma telemática con la comisión ejecutiva de la FVMP y los presidentes de las diputaciones.
En la reunión, el presidente del Consell agradeció la extraordinaria labor que están realizando los representantes locales para hacer frente a la pandemia y les invitó a que participen en ese gran acuerdo por la reconstrucción de la Comunidad Valenciana, un acuerdo que facilitará que haya una hoja de ruta común para relanzar el tejido productivo valenciano. Así, destacó que los valencianos «ya hemos superado en el pasado situaciones muy duras y que ahora lo volveremos a hacer».
En la reunión con los representantes del mundo local intervinieron, además del presidente Ximo Puig, el presidente de la FVMP (Rubén Alfaro), los presidentes de las tres diputaciones (Toni Gaspar, Carlos Mazón y Josep Martí) y los miembros de la FVMP y representantes locales de Alzira, Algemesí, El Campello, Xàtiva, Monforte del Cid, Puçol, Montesa, Pego, Càlig, Caudete de las Fuentes, Cocentaina y Paterna.
También quiso escuchar el jefe del Consell sus propuestas y planteamientos de cara a la desescalada, ante esa labor quirúrgica que habrá que realizar porque existe mucha asimetría también dentro de la Comunidad Valenciana.
En el canutazo, Puig también planteó la conveniencia de que se empiece a abrir la posibilidad de realización de ejercicio físico por parte de la población y en particular que se analice la salida también de las personas mayores, al igual que ha pasado ahora con los niños.
En la reunión, se constató el respaldo del mundo local al Acuerdo Valenciano por la Reconstrucción de la CV impulsado por el presidente y la Federació Valenciana de Municipis i Províncies, que ha asumido la invitación a participar en ese acuerdo. También se evidenció la apuesta por un clima político valenciano favorable al diálogo y los acuerdos, desde el convencimiento de que la mejora de ese clima político ayuda a encontrar las soluciones ante la dramática situación generada por la pandemia.
«No se trata solo de que los niños puedan salir ya sino que también, más pronto que tarde, pueda salir el conjunto de la población, sobre todo aquella a la que estar en casa confinados tiene un perjuicio grave para su salud a medio plazo», apuntó Puig.
En concreto, se refirió a la conveniencia de que se analice la salida también de las personas mayores, al igual que ha pasado ahora con los niños. No obstante, el president reconoció la dificultad que tiene afrontar este desconfinamiento «sin un recetario». Asimismo, agradeció a los alcaldes su trabajo «en primera línea» y les instó a formar parte del «Gran pacto valenciano» tras la Covid-19, que «tiene que contar con el brazo institucional que es fundamental».
Mazón exige «certezas» al Gobierno central
El presidente de la Diputación de Alicante, Carlos Mazón, exigió ayer «certezas» al gobierno de Pedro Sánchez para la próxima desescalada, ante la «incerteza general» que se ha instalado en toda la población española. Mazón realizó esta y otras reivindicaciones ante el presidente de la Generalitat, Ximo Puig, durante un encuentro online en el que también participaron sus homólogos en las diputaciones de València y Castellón, quienes coincidieron en la necesidad de que el Gobierno clarifique el proceso de desescalada. En este mismo sentido, Mazón explicó que las diferencias para desescalar no son solo de territorios, sino también de sectores productivos.
El presidente de la Diputación de Alicante también instó a Sánchez a que asuma como propia la exigencia de las diputaciones y de los ayuntamientos de poder usar ya el superávit con el que cuentan para destinarlo a los gastos derivados de la crisis sanitaria, económica y social provocada por la pandemia. De otro lado, Carlos Mazón pidió a Puig que consulte con los municipios y los sectores productivos.
