La Policía Local de Alicante ha impuesto cerca de dos mil denuncias por desobediencia durante el primer mes del estado de alarma, duplicándose el número de multas esta Semana Santa y, además, se ha detenido a 20 personas, según ha indicado el balance de las intervenciones de este cuerpo municipal en los dispositivos organizados para frente al Covid-19.

En el amplio operativo policial organizado los agentes sorprendieron a un bañista, en la mañana del sábado, cerca del Cabo de las Huertas, un hombre de 31 años que vivía en un chalet de la zona, y alegó a los agentes que "ya no podía más estar encerrado en casa y había decidido salir a darse un baño". De igual manera pensó otra mujer que a media mañana accedió a la Playa de San Juan porque "necesitaba ver el mar", y también los agentes localizaron a un grupo paseando por el Castillo de Santa Bárbara que fueron sancionados.

Con respecto a los controles se volvieron a intensificar los operativos en todos los accesos y salidas de Alicante, con especial intensidad en la zona de playas para controlar las personas que han venido de otras ciudades, con incidencia en zonas aledañas a grandes cadenas de supermercados, y se localizaron y sancionaron a personas que incumpliendo el confinamiento se han trasladado a segundas residencias desde Villena, Zaragoza, Albacete y Madrid.

El endurecimiento de los controles y los dispositivos organizados para lograr el total cumplimiento de las medidas durante este mes ha conllevado un incremento de personas identificadas en la vía pública, sobre todo esta última semana, que suman ya un total de 13.427, así como se ha dado el alto a 11.653 vehículos en los controles que realiza la Policía Local.

Durante estos días, los agentes policiales también sancionaron en Pasaje Maestro Enrique Granados a un grupo de diez personas que estaban reunidas, y a otro grupo de personas haciendo deporte en una urbanización avenida de Niza. Además, entre las denuncias que se han interpuesto también destacan la de dos personas en la calle Azorín que acuden a comer a casa de familiar todos los días lejos de su domicilio, también la fiesta que han tenido que disolver en la calle Cronista Vicente Morella y a un grupo de cuatro personas bebiendo en la calle Padre Espla.

Asimismo, en otro de los dispositivos policiales, se ha sancionado a dos grupos de varias personas paseando a un perro en la avenida de San Sebastián y otro en la calle Músico Vicente Spiteri Galiano. Durante el operativo de la noche se ha multado a siete personas por incumplir el estado de alarma, y se ha intervenido en tres incendios, dos de ellos provocados en contenedores en la avenida Costa Blanca y Santander. Además de un tercer incendio en la ladera del monte Tossal originado en una palmera que fue controlado y extinguido con celeridad por los bomberos del Servicio de Prevención, Extinción de Incendios y Salvamento en el acceso del Castillo de San Fernando.

Por su parte, el concejal de Seguridad, José Ramón González, ha agradecido "a la inmensa mayoría de personas que se quedan en casa", y hace un llamamiento tras superar el mes "a la minoría que decide incumplirlo y salir para que tomen conciencia y cumplan el deber cívico y la responsabilidad de permanecer confinados y podamos hacer frente al coronavirus".

La Policía Local se ha mostrado muy satisfecha este mes de confinamiento señalando que la inmensa mayoría de ciudadanos lo están cumpliendo, al tiempo que ha pedido un esfuerzo en estas próximas semanas que quedan y ha apelado una vez más a que "no salgan a realizar deporte, pasear, visitar amigos o familiares, realizar fiestas, ni juntarse con gente en la calle o reunirse con otros dueños de perros, así como tampoco está autorizado el realizar en el interior de las urbanizaciones lo que no está permitido en la vía pública".