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CORONAVIRUS

La patronal prevé que tras la alarma el ladrillo repunte de nuevo en la provincia

Los promotores reinician el martes las obras de las 12.000 viviendas paradas por el Covid-19, en un proceso gradual por las medidas anticontagio

Imagen tomada ayer de una promoción de viviendas en Alicante parada por el estado de alerta por el coronavirus, a la que el martes previsiblemente volverán los operarios. rafa arjones

La decisión del Gobierno de abrir la mano para que la construcción y la gran industria puedan reanudar a partir de la próxima semana la actividad paralizada durante quince días, ha sido recibida como un balón de oxígeno en el sector inmobiliario de la provincia, que a partir del martes reanudará las obras en las alrededor de 12.000 viviendas que se están edificando.

Será un proceso, no obstante, progresivo, por las medidas de prevención contra el Covid-19 para preservar la salud de los trabajadores, y porque en los últimos días también se ha parado el suministro de materiales, según apuntó ayer Jesualdo Ros, secretario general de Provia. Entre las promotoras que reanudan obras esstán Aedas, TM y Alibuilding, que tiene ahora 400 viviendas en marcha en la Playa de San Juan, Benidorm, Dénia y Madrid.

Aunque ahora las ventas están paradas, los promotores han comprobado que la demanda no se ha resentido y «aunque los meses siguientes al levantamiento del estado de alarma serán complicados por la incertidumbre general, pensamos que después la recuperación será rápida e, incluso, puede haber un relanzamiento de las ventas. El coronavirus ha tenido un efecto positivo en el sentido de que valoremos más las casas donde vivimos», subrayó Jesualdo Ros.

Provia trabaja con la Administración (Consell y Ayuntamientos) para que la situación se normalice lo antes posible y, por ejemplo, se busca una flexibilización del trabajo para no parar, por ejemplo, en los días festivos. También se ultiman fórmulas para poder escriturar esas viviendas cuya venta está cerrada y se deben entregar en las próximas semanas. Obviamente, los dueños no pueden desplazarse ahora a la provincia. Por otro lado, las promotoras diseñan campañas de promoción para contribuir a reactivar el mercado.

El precio medio de la vivienda en la provincia está en estos momentos en los 1.663 euros/m2 de los pisos nuevos, tras subir un 3,1% en 2019, y en 1.290 euros/m2 en la usada, según un informe de la Sociedad de Tasación que revela, no obstante, que el índice de confianza de los potenciales compradores ha caído y ahora mismo no se sabe cuál puede ser la reacción de la demanda por el impacto que pueda tener la crisis del Covid-19, algo que contrasta con el optimismo de los promotores. En cuanto al alquiler, Alicante sigue siendo una provincia atractiva para invertir en la compra de pisos para alquilar, ya que según el estudio de la Sociedad de Tasación la rentabilidad anual es del 6,9%.

En cuanto a la «desescalada» para volver la normalidad, el Ayuntamiento de Alicante ha aprobado priorizar la tramitación de licencias urbanísticas que garanticen la creación de más puestos de trabajo. El edil de Urbanismo, Adrián Santos, subraya que «desde el Ayuntamiento confiamos en la capacidad de la construcción para convertirse en un motor de la economía local una vez superemos la crisis sanitaria». Urbanismo dará prioridad a las licencias de mayor volumen económico y mayor capacidad de contratación, una posibilidad que se contempla en la nueva ordenanza de licencias urbanísticas que se encuentra en tramitación. No obstante, se ha decidido no esperar a la aprobación definitiva puesto que, tras el preceptivo informe, existe cobertura legal en la legislación vigente a nivel nacional para aplicar procedimientos de tramitación de urgencia que reduzcan al mínimo imprescindible los trámites para conceder las licencias.

Además, la Concejalía de Urbanismo ha decidido prorrogar todos los plazos de las licencias concedidas para las obras en marcha -ya sean las tramitadas a través de una declaración responsable, las que se conceden para obra menor, las de demolición y las de obra mayor- por el mismo periodo que dure la suspensión de actividad decidido por el Gobierno en decreto de estado de alarma.

Santos sostiene que la decisión de priorizar las licencias urbanísticas con más capacidad de crear puestos de trabajo se enmarca dentro del conjunto de medidas que está tomando el Ayuntamiento de Alicante, y se ha referido a otras como la supresión del pago de alquileres o la prórroga de los plazos para pagar los impuestos y tasas municipales. El objetivo de todo ello es «contribuir en la medida de nuestras posibilidades y competencias en liberar a familias, autónomos y empresas de cualquier presión o traba adicional a la que ya padecen por situación creada a raíz de la expansión del Covid-19», aseveró el concejal.

El Ayuntamiento de Alicante habilitará dentro del área de Urbanismo de la web municipal (www.alicante.es) un espacio para informar y tramitar la petición del procedimiento por la vía de urgencia de licencias urbanísticas para que así lo soliciten las empresas que consideren que están dentro de las circunstancias establecidas para recurrir a este procedimiento administrativo de urgencia.

En 2019, por primera vez desde 2012 (el año en que tocó fondo el ciclo anterior) se produjo una caída en el número de viviendas iniciadas en la provincia con respecto al año anterior. Así, en 2019 se iniciaron 7.143 viviendas, frente a las 7.532 de 2018, lo que supuso una caída del 5%, y de 389 viviendas. Esta caída en el total de la provincia refleja sin embargo, un comportamiento desigual una vez se analiza la actividad de las distintas comarcas.

Elche registró un crecimiento del 44% con respecto a 2018, añadiendo 228 viviendas para alcanzar las 744 iniciadas en el año. También en el área de Alicante se produce un crecimiento del 5% con 1.538 viviendas frente a las 1.471 de 2018. En las Marinas, la caída es de únicamente un 2%, con lo que las 1.638 viviendas iniciadas en la zona son solo 32 menos que el año anterior. Es la Vega Baja el origen de la desaceleración. La caída en la comarca es de 527 viviendas con respecto a 2018, lo que supone un 15% de descenso.

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