Anoche, Martes Santo, fueron cuatro las hermandades y cofradías de la Semana Santa alicantina que debían salir en procesión y poner sus pasos en la calle. Pero no pudo ser así y es que es por todos conocido que a causa de la pandemia del Covid-19 Alicante fue la primera ciudad en España en suspender las procesiones de Semana Santa. No obstante, algunas hermandades no se han resignado y han querido acercar sus pasos a los alicantinos a través de internet.

Un total de 3.125 personas se conectó a la retransmisión que la Hermandad del Cristo del Mar ofreció a través de sus redes sociales a partir de las siete de la tarde, cuando sus pasos, el Cristo del Mar y el paso de palio de la Virgen de los Dolores y San Juan de la Palma, debían cruzar el dintel de la Basílica de Santa María en busca de la Carrera Oficial. En su lugar, la hermandad emitió más de cuatro horas de contenido audiovisual con retransmisiones, videos y documentales de otros años que llevaron hasta los domicilios de los alicantinos la salida de esta popular cofradía con más de cien años de historia.

Otro momento emocionante se dio cuando a las 20 horas, después del aplauso a los sanitarios, las calles del recorrido que el Cristo del Mar suele realizar por el casco antiguo de la ciudad, y en especial la calle Villavieja, se inundaron del sonido de marchas procesionales de Semana Santa que los vecinos hicieron sonar desde sus balcones ante unas calles desiertas.

La del Cristo del Mar no fue la única cofradía del Martes Santo que llevó a cabo este tipo de iniciativas y a la hora en la que debían abrir las puertas de las iglesias para que saliesen los cortejos procesionales las hermandades del Ecce-homo y Stabat Mater también ofrecieron la redifusión de sus procesiones a través de sus propios canales de YouTube y fueron seguidas por varios centenares de personas.

Hoy, Miércoles Santo, saldría a la calle la Hermandad de Santa Cruz, y fuentes de la cofradía informan de que también tienen preparada una programación especial a través de sus perfiles oficiales para un año más llegar al corazón de todos los alicantinos que no podrán acercarse al barrio para contemplar el descenso de sus cuatro pasos en un año en el que se celebra su 75 aniversario.