Un centenar de empresas de la Foia, principalmente de Ibi y Castalla, están fabricando material sanitario para hacer frente a la crisis del coronavirus Covid-19. La industria de la comarca, a través de esta iniciativa, ha reivindicado su capacidad para adaptarse y dar respuesta inmediata a las necesidades provocadas por la pandemia.
Fruto del talante altruista de 17 empresas de la Foia, que donaron 15.000 protectores faciales a hospitales y centros de salud de la provincia de Alicante, ha surgido una iniciativa mucho más ambiciosa en la que colaboran un centenar de firmas de esta comarca, conocida como el Valle del Juguete. Todas ellas se han reinventado temporalmente para poner toda su capacidad industrial y productiva al servicio de las administraciones públicas para luchar contra el Covid-19.
Empresas de diferentes sectores han adaptado sus instalaciones para fabricar equipos de protección individual; mascarillas; piezas de respiradores; mamparas separadoras para hospitales, supermercados o farmacias; cuñas, cortinas y contenedores de uso sanitario o para la industria alimentaria.
El director de la Asociación de Empresarios de la Foia de Castalla (Ibiae), Héctor Torrente, explica que «estas empresas cubren todo el ciclo industrial, desde el diseño y la fabricación, al embalaje y la distribución, lo que nos está permitiendo ofrecer una respuesta inmediata».
Un ejemplo de la capacidad productiva de las empresas de la comarca es que en tan sólo tres días pueden fabricar 150.000 protectores faciales. «Tenemos la capacidad y flexibilidad -señala Torrente- que permiten a empresas como Actiu, que diseña y produce mobiliario de vanguardia para espacios de trabajo, empezar a fabricar, de un día para otro, batas y mascarillas de protección o mamparas protectoras autoportantes para los empleados de farmacias y supermercados».
El director de Ibiae también destaca que el cambio de rumbo en la producción es temporal. «Cuando todo esto pase, seguiremos casi con toda seguridad con nuestra actividad habitual», apunta. Pero, mientras tanto, los empresarios de la zona creen que «podemos ser de gran utilidad» y dar una respuesta rápida.
La capacidad para adaptarse a las necesidades también es uno de los aspectos que destaca Soledat Berbegal, consejera y directora de reputación de Actiu, quien subraya que «es evidente que la situación actual de desabastecimiento de productos sanitarios ha puesto de manifiesto que nuestro país debe tener mayor tejido industrial y solidez».
Soledat Berbegal deja claro que, «desde Actiu, sabemos que hay que arrimar el hombro en estos momentos para aportar nuestro granito de arena a través de nuestros recursos, innovación, personas y economía para resolver esta situación lo antes posible». Y una muestra de ello es la donación que esta firma ha hecho a hospitales, entre ellos al que se ha habilitado en Ifema, en Madrid, o su colaboración en la fabricación de material sanitario.
