P La acaban de nombrar Alta Comisionada de la Generalitat para el Covid-19, ¿en qué va a consistir su labor?
R Llevo más de tres semanas trabajando intensamente en el uso de los datos para la ayuda en la toma de decisiones, el nombramiento es una formalización de un trabajo que ya estábamos llevando a cabo. He creado diferentes equipos que están formados por grupos de expertos de la Comunidad Valenciana en Inteligencia Artificial y análisis de datos y estamos trabajando en tres grupos diferentes. El trabajo es voluntario y altruista.
P ¿Cuáles son esos grupos de trabajo?
R El primero es sobre el análisis de los datos agregados y anonimizados de movilidad que dieron lugar a la creación de esta iniciativa y su posterior adopción por parte de la Secretaría de Estado de Sociedad Digital e Inteligencia Artificial. De hecho, nuestro trabajo será el programa piloto a nivel nacional como anunció la vicepresidenta del Gobierno Nadia Calviño. Esta área tiene dos objetivos, el primero es cuantificar el impacto que las medidas de contención social están teniendo en la población. Se han tomado medidas para reducir la movilidad de la población, pero la pregunta es ¿se está reduciendo? ¿en qué porcentaje? Esta información es importante porque en función de la reducción podremos ralentizar más o menos la propagación de la pandemia. La segunda utilidad es la elaboración de modelos de movilidad que podamos utilizar en el segundo grupo de trabajo, dedicado al desarrollo de modelos epidemiológicos, para poder hacer predicciones más precisas del impacto en el futuro, de cuándo alcanzaremos el pico de infección y bajo qué escenarios de movilidad habría más o menos casos. Y ayudar así a la toma de decisiones de las políticas públicas.
P ¿Y los otros grupos?
R El segundo es el de la elaboración de modelos epidemiológicos que incorporen la movilidad. Y el tercero es más diverso. Se trata de hacer todo tipo de análisis de datos, como por ejemplo el análisis de los datos de los cuestionarios que hemos lanzado los últimos dos fines de semana a la población para conocer el impacto de la pandemia.
P Este tipo de análisis de datos es entonces a contrarreloj porque ya tenemos aquí la pandemia.
R Elaboramos modelos de predicción cada día del número de casos, de las UCI, de fallecidos, de hospitalizados y los compartimos con Presidencia de la Generalitat. Hay mucha presión temporal, cada día hay que generar resultados y se tienen en cuenta por parte de los representantes políticos. Es un ejemplo muy interesante de la colaboración entre la sociedad civil y las instituciones públicas de manera dinámica e intensa para ayudar a tomar mejores decisiones en la crisis del coronavirus. Yo tengo experiencia en el área del uso de la Inteligencia Artificial y los datos para el bien social y es muy raro encontrar equipos mixtos de colaboración de expertos con las personas que toman las decisiones. La metodología que estamos desarrollando es muy interesante para compartir en otras comunidades o en otros países. Nuestro objetivo es ayudar a la toma de decisiones a partir de la evidencia.
P El rastreo de móviles genera muchas dudas por la privacidad y por el uso que se pueda hacer de esos datos y ya se escuchan iniciativas en este sentido, ¿en qué momento nos encontramos?
R Rastreo de móviles en España no se realiza. Lo que hacemos nosotros es analizar datos de movilidad agregados de estimaciones de flujos de movilidad entre municipios o entre provincias. Las aplicaciones donde se hace un registro de los potenciales contactos de las personas para poder avisarles de un positivo por coronavirus y que se pongan en cuarentena no se están utilizando en Europa. Existen numerosas propuestas de aplicaciones móviles con este tipo de funcionalidad que están siendo consideradas. A nivel europeo, hay una iniciativa, de la que formo parte junto a más de 130 investigadores de sistemas móviles. Esta iniciativa permitiría agregar una funcionalidad para detectar a los contactos de una persona que da positivo en coronavirus preservando totalmente la privacidad. Se trataría de agregar esta funcionalidad a las aplicaciones móviles que ya existen y que han puesto en marcha comunidades autónomas como Madrid o Cataluña en las que las personas pueden introducir sus síntomas y la app va aconsejando sobre lo que se debe hacer, es decir, si por ejemplo una persona debe acudir al hospital. De esta forma se detectarían los contactos de los positivos para que se pusieran en cuarentena e intentar evitar volver a la situación de trasmisión comunitaria que es el escenario en el que nos encontramos ahora.
P ¿Hemos llegado tarde al confinamiento tras ver lo que ocurría en Italia?
R Los estudios dicen que cuanto antes intervienes ganas en ralentizar la pandemia, así como en disminuir el pico y evitar la superación de la capacidad del sistema sanitario.
P Por los modelos que manejan, ¿cree que habría que alargar el confinamiento?
R Lo primero ahora es conseguir llegar al pico y que el número de casos neto vaya disminuyendo. Una vez que lleguemos ahí tenemos que tener implantadas infraestructuras para la fase de control de la enfermedad infecciosa. Hasta que no tengamos una solución farmacológica, es decir, una vacuna o un tratamiento eficaz, la expectativa es que el coronavirus va a seguir presente en la sociedad. Si no implementamos mecanismos y protocolos volveremos a tener una pandemia porque ahora mismo no hay evidencias de que la persona que ha contraído el coronavirus se inmunice. Si hubiese una garantía de inmunidad se produciría lo que se conoce como el efecto rebaño y la población estaría protegida.
P¿Qué medidas se deberían adoptar en esta fase de control?
R En mi opinión ya se debería estar trabajando en cinco áreas para ayudar a controlar la propagación del virus y evitar una segunda oleada. En el área de las ciencias de datos para la toma de decisiones y en crear una infraestructura para hacer test diagnósticos a gran escala y detectar así los casos asintomáticos que transmiten la enfermedad. El tercer bloque sería el de la cuarentena. Tendríamos que tener la capacidad para que tanto las personas que hayan dado positivo pero no deban estar hospitalizadas como sus contactos puedan hacer una cuarentena efectiva. Pedirle que cumpla una cuarentena a una persona que vive en 60 metros cuadrados con cuatro miembros de su familia es muy difícil, por eso tenemos que tener infraestructuras preparadas para personas en este tipo de situaciones. El cuarto bloque sería el de la aplicación móvil que aparte de dar consejos pueda avisar a los contactos de un caso positivo para que se queden en cuarentena. Y el último bloque sería destinar un esfuerzo al diseño de medidas de protección para el personal sanitario, los servicios esenciales y las personas mayores.
