La Policía Local de Alicante ha atendido desde que se decretó el estado de alarma más de 10.000 llamadas telefónicas para acudir a centenares de emergencias, auxiliar a personas, resolver dudas y consultas, y denunciar a particulares por incumplir las medidas establecidas por el Gobierno para hacer frente al Covid-19.

El endurecimiento de los controles y los dispositivos organizados para lograr el total cumplimiento del confinamiento han conllevado a un incremento de personas identificadas en la vía pública y de vehículos interceptados, que suman más de 3.200 en lo que llevamos de semana, según ha informado este viernes la Concejalía de Seguridad.

Además, cerca de un millar de multas -trescientas en estos cinco días- se ha impuesto desde que dio inicio el dispositivo policial por la crisis de la pandemia. Dos de las últimas han sido a sendos surfistas que estaban practicando deporte en la Albufereta y fueron obligados a salir del agua.

El edil de Seguridad, José Ramón González, ha dado hoy la enhorabuena y expresado su agradecimiento a los policías locales de Alicante por "el excepcional trabajo que están realizando diariamente, demostrando un alto nivel de profesionalidad y entrega para hacer cumplir todas las medidas".

También ha puesto en valor "la labor de auxilio ciudadano a los que más lo necesitan, ya que son muchas las llamadas" que están atendiendo.

Entre las últimas intervenciones policiales figura la detención de un hombre de 28 años en la avenida de la Universidad acusado de uno delito contra la salud pública y tenencia de estupefacientes, tras serle intervenidos más de cien gramos de hachís, ocultos bajo la palanca de cambios, y 1.350 euros, y de otro varón, de 30, en Barítono Paco Latorre por una presunta infracción de tráfico.

Los agentes también han sacado del agua y multado a dos surfistas en la playa de la Albufereta, además de haber sancionado a una persona en el Castillo Santa Bárbara por hacer fotos desde la ladera y a otra por practicar deporte en Médico Pérez Martorell.

Asimismo, han identificado a treinta personas en los controles de perros y sancionado a dos, y han acudido a la calle Tucumán donde estaban jugando varios menores al fútbol y a una urbanización de Urbanova porque había muchos vecinos congregados.

De igual forma, han disuelto dos fiestas que se celebraban en sendos domicilios, una, con más de diez asistentes, en la calle Cerdá, y la otra, esta mañana, en Doctor Nieto, entre otras actuaciones.